Dispararon sin mediar palabra y no iban con intención de robar. Esa es una de las primeras conclusiones que ha trascendido al inicio de la investigación de un suceso que ha conmocionado no sólo a la localidad de Medina del Campo(Valladolid), escenario del doble asesinato, sino también a Arévalo y a la vecina Nava de Arévalo, las dos localidades abulenses a las que ha estado ligada una de las víctimas.
Los hechos tuvieron lugar en la noche del pasado domingo, 5 de octubre, cuando dos individuos, a cara descubierta y sin mediar palabra, dispararon mortalmente en el interior del club Las Vegas, en las afueras de Medina, contra M. E. G,, de 43 años de edad, al parecer dueño del establecimiento, y L.M.G., de 25 años de edad, de nacionalidad rumana, supuestamente camarera del club.
Según ha podido saber este periódico, el hombre ha estado muy vinculado a Nava de Arévalo, al igual que su amplia familia, donde habría pasado su infancia y adolescencia. Posteriormente, la víctima mantuvo una prolongada vecindad en Arévalo, donde, al parecer, también ha ejercido como empresario de hostelería. M.E.G. tenía descendencia y también vinculación con Adanero. La investigación del Cuerpo Nacional de Policía no ha hecho más que empezar y de ella ha trascendido muy poco puesto que el caso se encuentra bajo secreto de sumario decretado por el Juzgado de Instrucción número 1 de Medina del Campo.
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