Arévalo se convirtió en sede del voluntariado de Cruz Roja gracias al encuentro regional que se organizó para reconocer la labor que hacen los voluntarios, «el alma» de esta asociación.
Para esta especial ocasión se reunieron unas 300 personas de las nueve provincias de la región que participaron en un acto que pretendía ser un foro de intercambio entre los asistentes a la vez que se sensibilizaba a la ciudadanía de la importancia del trabajo que hacen estas personas.
Al tratarse de un acto en el que sobre todo se quería poner de relevancia la labor de los voluntarios, fue también el lugar y momento escogido para entregar las medallas y distinciones a aquellas personas que han destacado por el desarrollo de las actividades voluntarias o en el apoyo, colaboración, defensa y difusión de los principios y objetivos de Cruz Roja.
Los voluntarios tuvieron la oportunidad de visitar la ciudad en una ruta guiada, aprovechando también la jornada para conocer ‘Credo’ En las medallas destacó la presencia de Ávila, llegando la de plata a Emilio Martín Martín, fundador de Cruz Roja Juventud en Ávila en 1973, y Fernando Díaz Sánchez, presidente de la Asamblea Local de Cebreros, médico de profesión, además de formador de voluntarios y encargado de implantar la red de proximidad local.
En la categoría de bronce los reconocimientos fueron para Carlos Pascual Asensio, presidente de la Asamblea Local de El Tiemblo; Borja Martín Sánchez, voluntario de la capital abulense; María del Mar González Doyaguez, voluntaria de Madrigal de las Altas Torres; Rubén Vallecillo Rodríguez, presidente de la Asamblea Local de Sotillo de la Adrada, y Gabriel López Jiménez, voluntario de Arévalo. En cuanto a las distinciones, fueron a parar a representantes de Segovia y Soria.
El acto contó con la presencia del presidente de Cruz roja de Castilla y León, José Varela, acompañado por los presidentes de Cruz Roja de Ávila y Arévalo, Javier Cerrada y Luis del Río, junto con las autoridades que no quisieron dejar de lado este acto tan especial. Por ello asistieron el alcalde de Arévalo, Vidal Galicia; el presidente de la Diputación, Agustín González, y representantes del área de Servicios Sociales de la Junta con la directora del centro de día de Arévalo, Sara López.
Todos ellos tuvieron unas palabras de bienvenida para los asistentes que, en el caso del presidente autonómico de Cruz Roja, se transformaron además en una forma de alabar la labor de los voluntarios a la vez que dejó claro el compromiso de estar cercanos a la sociedad y a sus necesidades, sobre todo en momentos tan complicados como los actuales en los que está cambiando la estructura de la sociedad.
En este espacio en el que es necesario adaptarse los voluntarios trabajan por la libertad y la dignificación de las personas, aseguró.
El acto también contó con la invitación realizada a Pablo Serrano, director de Diario de Ávila, que fue quien se encargó de pronunciar la ponencia de la jornada. En sus palabras se ensalzó especialmente la figura del voluntario de Cruz Roja así como la importancia que pueden llegar a tener los medios de comunicación para esta ONG. Además animó a los voluntarios a contar sus historias a través de estos medios como una forma de remover conciencias y construir entre todos una ciudad mejor.
Su discurso también tuvo espacio para el recuerdo de Arévalo como ciudad humanitaria que ha tenido la posibilidad de acoger este encuentro.
Una vez que finalizó el acto, el grupo de voluntarios tuvo la oportunidad de realizar una visita guiada a Arévalo y conocer la exposición Credo.