La lluvia obligó a celebrar los Toques de Pasión en San Francisco

M.M.G.
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Más de 500 músicos y otros tantos espectadores buscaron el cobijo del auditorio municipal, que se quedó pequeño para acoger el espectáculo previo a la Semana Santa

XV Certamen Nacional Toques de la Pasión Ciudad de Ávila. - Foto: David Castro

 No es la primera vez que ocurre, pero no por ello deja de entristecer a sus organizadores. El XV Certamen Nacional ‘Toques de la Pasión. Ciudad de Ávila’ hubo de celebrarse el domingo a cubierto, dada la intensa lluvia que durante toda la jornada cayó sobre Ávila. «Una vez más nos tenemos que trasladar aquí», se lamentaba antes de iniciar la sesión matutina Tomás García, director de la Banda de Cornetas y Tambores El Amarrado, la anfitriona del espectáculo, que recordaba que si ésta era la decimoquinta edición, al menos la mitad ha debido celebrarse bajo techo.

Más de 500 músicos y otros tantos espectadores abarrotaron  el Auditorio Municipal de San Francisco, que se quedó pequeño para escuchar los sonidos más típicos de los días santos que se avecinan.

Seis bandas por la mañana, la más veteranas, y otras seis por la tarde, en este caso las que están comenzando, presentaron ante el público abulense los temas que durante todos estos días acompañaran los pasos en las procesiones.

XV Certamen Nacional Toques de la Pasión Ciudad de Ávila.XV Certamen Nacional Toques de la Pasión Ciudad de Ávila. - Foto: David Castro Los encargados de abrir fuego fueron los músicos de la banda Padre Nuestro, de Palencia, que sorprendieron al público con la ‘banda sonora’ de los conocidos dibujos animados Oliver y Benji. Fue un simpático guiño y el perfecto aperitivo para todo lo que vino después: un completísimo repertorio de marchas procesionales a las que cada banda puso su toque particular.

A las tablas de San Francisco también subieron los músicos de la Sagrada Lanza, de Valladolid; Dolores del Rosario, de Baeza, Jaén; Buena Muerte, de Palencia; y Nuestra Señora de las Angustias de Porcuna, en Jaén.

El broche de oro, como no podía ser de otra forma, vino de la mano de la banda El Amarrado, de Ávila, que interpretaron marchas de composición propia y que se incorporarán próximamente al disco en el que ya se está trabajando.

Y como decíamos, la tarde se reservó en San Francisco a las bandas noveles. La sesión arrancó con la música de El Amarrado Juvenil, de Ávila. Tras ellos interpretaron sus piezas las bandas La Soledad de Valencia de Don Juan, de León; Cristo del Caño, de El Barco de Ávila; Santísimo Cristo del Perdón, de Tordesillas, Valladolid; Nuestra Señora de la Inmaculada, de Nava del Rey, Valladolid; y Nuestra Señora de la Vega, de Benavente, Zamora.

El cierre de la edición corrió a cargo de los anfitriones, los veteranos de El Amarrado, que ya sueñan con poder realizar la décimo sexta edición del certamen aunque, eso sí, al aire libre.