El ciclo de conferencias ‘Encuentros por una ciudadanía crítica’ contó este jueves con la presencia de Jonathan Gómez Cantero, geógrafo-climatólogo dedicado al estudio y análisis de los riesgos naturales, especialmente los de origen meteorológico, que es miembro de la Comisión Técnica en Riesgos Naturales y del Panel Intergubernamental para el Cambio Climático (IPCC) de la ONU, el cual habló del cambio climático que sufre el planeta.
Para luchar de verdad contra el cambio climático, dijo el ponente, «se necesita sobre todo voluntad política, especialmente contra esas grandes emisiones que hacen los países. Y después se necesitan, por supuesto, los medios, y facilitar medios a los ciudadanos. Pero para que los ciudadanos tengan los medios tiene que haber una voluntad política detrás; o sea, que en el fondo esto es cosa de voluntad».
Comentó Gómez Cantero que «después de la cumbre del clima de París celebrada el pasado diciembre parece ser que va a empezar a lucharse seriamente contra el cambio climático, aunque yo opino que se podía haber avanzado mucho más de lo que se hizo», pero luego hay decisiones contradictorias como que «hace unos días la UE haya autorizado que aviones y coches puedan emitir un poquito más de lo que han emitido hasta ahora, un sinsentido que no me explico».
Para entender esa situación tan contradictoria, añadió, hay que tener en cuenta que «la economía pesa demasiado, y sobre todo los lobbys económicos de buena parte del hemisferio norte, que tienen detrás una gran infraestructura basada en los combustibles fósiles, que realmente ni se quiere ni se puede abandonar de un día para otro». El problema para cambiar el rumbo no es tanto «cuestión de convencerles (a esos lobbys), porque en realidad saben lo que hay, sino de que quieran hacer algo, ya que muchas veces les da miedo hacerlo no se sabe si porque tengan demasiada presión o porque el sistema económico que a ellos les permite estar ahí y les sostiene es el que es, y no a todos nos gustaría quitarnos los buenos cimientos sobre los que estamos asentados».
Sobre la posibilidad de dar la vuelta al cambio climático, Gómez respondió que «estamos a punto de llegar al punto ‘no retorno’, que se considera el aumento de dos grados centígrados de la temperatura media del planeta; ya estamos en un grado, y aunque ahora mismo frenáramos de golpe la emisión de gases de efecto invernadero sólo con los que tenemos en la atmósfera llegaríamos probablemente a 1,9; es decir, que la situación está ya muy cerca del no retorno».
Así la cosa, finalizó, «creo que hay que ser relativamente pesimistas, pero para conseguir luchar con optimismo por ese objetivo y lograr algo. Es posible hacerlo, pero lo que nos hace falta es que quieran hacerlo los que tienen que decir que esto se haga».