José Zahonero de Robles fue un periodista y escritor abulense extraordinariamente prolífico en su labor creativa, tanto que a lo largo de sus 78 años de vida (1853-1931) dejó escritas más de 1.600 obras literarias entre novelas, novelas cortas, cuentos, cuentecillos y obras de teatro; además de fecundo, este escritor demostró también una buena calidad literaria y una nada despreciable capacidad para aportar cosas nuevas y de interés al mundo de la escritura, lo que bien debería haberle hecho en el mundo de las letras un hueco o huequecillo del que nunca ha disfrutado.
Tristemente desconocido en su ciudad natal, a reivindicar públicamente su memoria e invitar a saborear el trabajo de su buena pluma ha dedicado muchos trabajos el profesor, investigador y editor abulense Jesús Arribas (igual que han hecho otros intelectuales como José Antonio Bernaldo de Quirós, desafortunadamente sin éxito), siendo su última aportación a esta tarea la publicación en Caleandrín Editores de un volumen que reúne dos de las muchas novelas de Zahonero: El señor obispo y Testavana.
Esos libros, «inencontrables y olvidados», ofrecen dos visiones muy diferentes y al tiempo complementarias de la vida y de la capital abulense concebidas por un escritor que, apunta Mayda Anias, también editora de Caleandrín, «fue furioso revolucionario y republicano en un principio y, más tarde, activo propagandista católico». El señor obispo es una obra de «corte naturalista y anticlerical» que Zahonero, siguiendo la estela de Clarín en su magnífica La Regenta, sitúa en la imaginaria Álbura, una ciudad «vetusta y levítica» que no es otra que su Ávila natal, mientras que Testavana son unas memorias en las que su autor da cuenta, a veces dejándose llevar por la fantasía, de su ajetreada vida y en las que aprovecha para «hacer confesión de sus pecados literarios».
La reedición de ambos libros en este volumen, ya a la venta, ha sido concebida antes como reivindicación de su autor que como edición crítica o académica, y por eso Jesús Arribas, que se define como «un editor que al fin y al cabo no deja de ser otro lector algo más avisado», ha preferido que las notas vayan al final del texto para que estorben lo mínimo a la lectura.
En la presentación del libro estuvieron ayer presentes varios representantes del mundo cultural abulense, demostrando que la figura y la obra de José Zahonero son capaces de despertar un interés que Jesús Arribas y Mayda Anias afirmaron que les gustaría que se trasladase al conjunto de la sociedad.