Consumo accede a sacar al aceite de oliva del Nutri-Score

SPC
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El sector clama contra este etiquetado, que deja a la joya de la dieta mediterránea a la altura de otras grasas como las de colza o nuez, nutricionalmente muy inferiores

Consumo accede a sacar al aceite de oliva del Nutri-Score

La sectorial nacional del aceite de oliva virgen con denominación de origen ha calificado de «insuficiente» la decisión del Gobierno de excluir al aceite de oliva virgen del sistema europeo Nutri-Score, que clasifica los alimentos en función de su impacto en la salud a través de un semáforo nutricional, al considerar que este sistema le otorga una nota muy inferior a la que le corresponde por su calidad y la sitúa junto a alimentos de un valor alimentario de un nivel muy inferior como, por ejemplo, el aceite de colza o el de nueces. De hecho, la exclusión del aceite de oliva virgen del Nutri-Score supone de facto no reconocer el valor beneficioso de dicho alimento, puesto que se excluiría de una herramienta que permite acreditar el valor saludable de los alimentos.

El secretario ejecutivo de la sectorial, José Manuel Bajo, ha sostenido que «el problema no se arregla quitando nuestro aceite de oliva del sistema en España, pues este se está implantando en numerosos países de Europa, sino luchando para que se le otorgue la máxima calificación de calidad alimentaria, que es la que le corresponde a un producto con las propiedades tan extraordinarias para la salud como nuestro aceite de oliva virgen». Por esta razón, desde la Sectorial se ha exigido al Gobierno de España que centre sus esfuerzos en lograr para los aceites de oliva virgen la calificación con la letra A de este sistema semafórico nutricional, que se adjudica a los alimentos de la mayor calidad del continente europeo, y para el aceite de oliva (mezcla de aceite de oliva refinado y aceite de oliva virgen) la clasificación B, por encima de los aceites de colza y nuez.

Las exigencias del sector de proteger la calificación del ‘oro líquido’ español vienen acompañadas también por el aval de prestigiosos científicos e investigadores, que han estampado su firma en un documento de rechazo a la implantación en España del etiquetado frontal Nutri-Score. Se trata de una comunicación abierta donde se irán incorporando más adhesiones y en la que los firmantes aseguran que la calificación prevista atenta contra la esencia de la dieta mediterránea, pues el consumo de aceite de oliva virgen es una parte esencial de dicha alimentación, y podría incluso conducir al abandono de uno de los modelos de alimentación más saludables del mundo, razón más que suficiente para desaconsejar su implantación en España y exigir su modificación a nivel europeo.

Finalmente, el Ministerio de Consumo, tras las quejas del sector, ha decidido sacar del etiquetado Nutri-Score a los aceites de oliva por no reflejar «sus beneficios nutricionales» y está resuelto a «trabajar para poner en valor la calidad de este producto básico para la dieta mediterránea». Desde el departamento que dirige Alberto Garzón aseguran que ya se «ha planteado formalmente ante los órganos de gobierno de Nutri-Score esta exclusión del aceite de oliva» y que la medida habría sido recibida «positivamente por el resto de países» de la Unión Europea.

autorregulación. Además, en el Consejo de Ministros de esta semana se ha aprobado el real decreto que permitirá la autorregulación del sector del aceite de oliva. Esta norma fija los requisitos y el contenido de una pauta de comercialización para reequilibrar la oferta y la demanda en función de las campañas a través de la retirada temporal de producto. Esta iniciativa forma parte de la hoja de ruta del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación para el sector olivarero y permitirá la retirada de aceite de los mercados por parte de todos los operadores en aquellas campañas en las que exista un exceso de producción que los perturbe. De esta forma se pretende favorecer la recuperación de los precios percibidos por los agricultores en situaciones de crisis como las que se han padecido en las dos campañas anteriores.

 

UPA y Lidl, por el olivar tradicional.

Tras meses de trabajo conjunto, el gigante de la distribución Lidl, la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) y el Grupo Migasa han desvelado la nueva gama de aceites de oliva virgen extra provenientes de olivar tradicional que remunerará adecuadamente a los productores.

El secretario general de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos, Lorenzo Ramos, ha calificado el lanzamiento de esta gama de productos como «un hito y un punto de inflexión» en las relaciones entre los productores y la distribución. Los nuevos aceites, que se pondrán a la venta este jueves, garantizan una retribución justa para los agricultores y aseguran la rentabilidad de sus explotaciones agrarias certificadas como olivar tradicional. El acuerdo alcanzado fija un precio mínimo por kilo de aceite que recibirá el agricultor y que en ningún caso será inferior, a pesar de que el precio en el mercado pueda estar por debajo.

Desde UPA han recordado las históricas manifestaciones que los olivareros comenzaron a celebrar hace ahora dos años, exigiendo respeto y precios justos: «el clamor que recorrió las calles ha sido escuchado. El lanzamiento de este aceite es prueba de ello».

El secretario general de UPA ha destacado la enorme calidad del aceite de oliva de olivar tradicional y ha puesto de manifiesto todos los beneficios que este modelo de producción conlleva: «la protección del medio ambiente, el mantenimiento de la vida en las zonas rurales y la lucha contra el despoblamiento. Apostar por este aceite es un acto de apoyo al medio rural y a sus habitantes», ha remarcado.