Está dispuesto a firmar un pacto salarial con los sindicatos, pero el presidente de la patronal CEOE, Antonio Garamendi, rechaza negociar «ni ahora ni nunca» un acuerdo con cláusulas que vinculen directamente sueldos a la inflación e insiste en que esos mecanismos son una «trampa» que daña la competitividad empresarial y el empleo.
Garamendi señala que la falta de flexibilidad de los sindicatos, que reclaman la inclusión de estas cláusulas en el marco de un nuevo acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC), es lo que hace «imposible» llegar a un acuerdo. «Una cosa es poner una cantidad y otra cosa es aceptar sine die que a partir de ahora los salarios van con el IPC», mantiene el empresario, que sostiene que lo importante es que la negociación colectiva, convenio a convenio, sigue funcionando.
El líder de la patronal subraya, así, la dificultad de alcanzar una recomendación salarial general en un contexto como el actual, aunque sí que ve recorrido para el acuerdo pero sin estos mecanismos. «No estamos diciendo que no haya subida salarial (...) sí veo recorrido al acuerdo pero no para implementar la cláusula (...) ni ahora ni nunca», incide.
Junto a esto, Garamendi también apunta que las medidas del Gobierno, como la subida del 8,6% de las bases máximas, no facilitan la situación y reconoce que tras esta decisión, «unilateral» y sin diálogo, el acuerdo para la segunda parte de la reforma de las pensiones es complicado. «Nosotros vamos a seguir sentándonos pero el acuerdo no va ser fácil porque no queda prácticamente nada de lo que hablar», reconoce.
También se muestra critico con unos Presupuestos que ven «desajustados» y que no abordan el problema del déficit en un contexto de tipos elevados. «Las deudas hay que pagarlas», subraya.
Renovación
A poco más de un mes para que se enfrente a su renovación como presidente de la patronal, Garamendi afirma haberse sentido respaldado entre sus filas. «Todos los acuerdos excepto dos -el primero de los ERTE y la reforma laboral- han tenido un apoyo unánime en esta casa», deja claro, al tiempo que descarta que esos votos díscolos respondieran a un rechazo a los consensos alcanzados.
Así, el líder de la patronal denuncia los «relatos» que interpretan esos votos como un rechazo a su gestión. «¿La abstención significa eso? Yo creo que no y no hay más que ver los apoyos que estoy teniendo en estos momentos» de cara a los próximos comicios en la CEOE, que se celebrarán el 23 de noviembre.
«La valentía es llegar a acuerdos», algo que «no siempre es fácil», porque los 15 pactos alcanzados con el Gobierno se han dado «en momentos complicados», pero siempre demostrando «la responsabilidad social que tenemos».