La presentación del libro Mezquitas y cementerios islámicos en la Castilla Medieval del Duero, a cargo de los investigadores Olatz Villanueva Zubizarreta (coordinadora del volumen), Serafín de Tapia Sánchez y Javier Jiménez Gadea (autores de uno de sus artículos), abrió este martes en el Archivo Histórico Provincial de Ávila el programa de actos de celebración de la Semana Internacional de los Archivo, una cita con lleno de público y en la que, en buena lógica, el interés de esa 'vieja Castilla' musulmana se centró en los vestigios hallados en Ávila.
El libro, explicaron los investigadores abulenses, recoge los trabajos de final de un proyecto de investigación I+D que terminó en 2021, que reúne «información de los principales sitios estudiados de Burgos, Valladolid, algunos un poco más genéricos de la contextualización de la comunidad musulmana en el contexto de Castilla, y tres artículos dedicados a Ávila, lo cual indica la importancia que Ávila ha tenido en este mundo del islam medieval castellano, ya que la comunidad de Ávila fue la más importante cuantitativa y cualitativamente de toda las castellanas».
Aprovechando esa presentación en Ávila los ponentes se centraron en los tres artículos del mismo dedicados a nuestra capital, y quisieron hacerlo en el Archivo Histórico Provincial, acompañados por su directora, CarmenLópez, «porque buena parte del trabajo y de la información que hemos utilizado ha salido del fondo documental que se conserva aquí».
Primero presentaron el artículo dedicado al análisis de antropología física de los restos exhumados en el cementerio islámico de San Nicolás, que aunque están asignados al Museo de Ávila están en depósito en la Universidad Autónoma de Madrid para que pueden llevarse a cabo esos estudios (el libro presenta otro artículo de los mismos autores sobre el análisis de los restos óseos de los cementerios musulmanes de Valladolid y de Cuéllar).
Y luego se centraron con más detalle «en dos de las mezquitas de Ávila, la de la Alquibla y la de la Villa». De la primera, explicó Javier Jiménez, «lo que hemos hecho en el trabajo es recopilar todos los documentos que la sitúan en ese solar de la calle Empedrada número 33 de Ávila, y por otro lado hemos hecho un análisis material de los restos físicos conservados para ver si podíamos determinar diferentes elementos murarios correspondientes a las distintas fases del edificio, que primero fue mezquita y a partir de 1502 fue hospital de la cofradía de las Ánimas del Purgatorio».
El otro artículo «en el que nos hemos centrado», añadió el director del Museo de Ávila, «es sobre la mezquita de la Villa, edificio situado en la calle Pocillo número 2 que hasta ahora se consideraba que era una sinagoga». Esa nueva propuesta de que «no fue una sinagoga sino la primera de las mezquitas que hubo en Ávila» ha tenido su razón de ser en «la información de archivo y en el análisis material del edificio», siendo «el argumento principal la propia orientación del edificio, que en la parte superior tiene una pequeña ventana que se abrió con posterioridad al uso como mezquita, cuando se convirtió en vivienda, y se abrió aprovechando el hueco del mihrab que había en la planta superior, un hueco ciego que hacía más fácil perforar allí la pared que en el grueso del muro».
En resumen, acabó Javier Jiménez, «la situación de ese mihrab transformado en ventana y la portada monumental, que tiene paralelismos en otros edificios de Ávila del siglo XIII, nos lleva a proponer que ese edificio fue la mezquita de la Villa».