Atenas es sinónimo de historia, de cultura y de orígenes. No en vano, esta polis fue en su época, junto con Esparta, el mayor centro cultural e intelectual del mundo y lugar de nacimiento de muchas de las ideas que aún definen la civilización occidental. Por eso, para un historiador Atenas es un destino soñado. Allí de hecho reside desde hace dos meses Guiomar Pulido González, graduada en Historia y especializada en Arqueología que se ha trasladado a Grecia para realizar parte de su tesis doctoral. Cuenta esta joven abulense de 25 años que es habitual que los doctorandos durante la realización de su tesis pasen por distintos países con el fin de «conocer otras universidades, a otros investigadores y otras formas de hacer». En su caso, Guiomar se ha decantado por Grecia, donde llegó a principios de año, fundamentalmente porque la Universidad de Atenas cuenta con una basta biblioteca con bibliografía muy específica sobre el tema que esta arqueóloga abulense está abordando en su tesis doctoral. «Lo que yo hago es estudiar las rutas de comercio mediterráneas para saber cómo llegaron al interior de la Península Ibérica», explica Guiomar, que está en su segundo año de tesis doctoral, la temática de su investigación. Y sobre este tema, apunta esta historiadora, en la Universidad de Atenas hay muchísima bibliografía y libros «muy especializados» que en España no son fáciles de encontrar.
La estancia de Guiomar en Atenas será breve ya que a principios de mayo esta joven abulense regresará a España, si bien con la idea de seguir completando su investigación con estancias en otras universidades europeas que le permitan obtener esa mención internacional para su doctorado. Es más, la siguiente en su lista es Roma, avanza su plan.
Aunque la realización de una tesis doctoral es exigente e implica muchas horas de trabajo investigador-«diez u once al día», en el caso de Guiomar-, lo que deja poco tiempo libre, esta joven historiadora abulense está aprovechando su estancia en la cuna de la civilización occidental para visitar todos aquellos yacimientos que protagonizan páginas y páginas de los libros de historia. Lugares como el santuario de Delfos, Micenas o la isla de Egina, que son algunos de los sitios que han centrado sus últimas visitas. Eso sí, de la capital de Grecia Guiomar habla «un poco decepcionada» ya que salvo la Acrópolis y los rincones más populares afirma que el resto de la ciudad no le ha gustado especialmente. «Atenas es un lugar que tenemos un poco idealizado», asegura.
«Los atenienses están locos», dice Guiomar divertida al hablar del tráfico caótico de una ciudad donde la vida es muy parecida a la española y donde se vive mucho «en la calle». Eso sí, dice, «la comida es increíble y muy barata», afirma esta joven arqueóloga al hablar de la gastronomía griega, de la que se declara fan y que aún podrá seguir degustando durante algunas semanas más.