La Junta de Castilla y León ha apostado por reforzar la asistencia a víctimas de agresión sexual y acaba de completar la adquisición de los nueve centros de atención que darán servicio en las nueve provincias. De esta manera, el servicio de centros de crisis que se ha venido prestando durante este año ya tiene ubicación definitiva. Las nueve capitales de provincia ya cuentan con un espacio fijo para continuar atendiendo a las víctimas de agresiones sexuales, nueve locales que se han adquirido por un importe total de 2,2 millones de euros con cargo a los fondos europeos y que estarán en funcionamiento antes de que acabe el año.
En Ávila el local elegido se ubica en el Pasaje del Císter número 2, al lado de la Delegación de la Junta, en pleno centro de la ciudad. Es el local de la antigua sede de Pronisa y que, todavía de su propiedad, la entidad venía utilizando para actividades de formación que ahora se trasladarán a otros espacios de los que dispone. Estaba «infrautilizado y se ha valorado el destino del proyecto y que va a poder ser utilizado por mujeres con y sin discapacidad», destacaron desde la entidad.
El local cuenta con algo más de 140 metros cuadrados de superficie y se ha adquirido por algo más de 157.000 euros, según se informó por parte de la Junta.
Todos los locales elegidos en las capitales de provincia para este fin se ubican en un área céntrica o semicéntrica de las ciudades, en planta baja y con acceso directo desde la vía urbana, para garantizar tanto la accesibilidad como la seguridad de las personas usuarias. Además, son locales con una superficie amplia, como mínimo entre los 120 metros cuadrados de las capitales de menor población –Ávila, Palencia, Segovia, Soria y Zamora– y los 160 metros cuadrados de las que cuentan con un mayor número de vecinos –Burgos, León, Salamanca y Valladolid–. Asimismo, los locales disponen de espacios necesarios para las diferentes funciones y ámbitos asistenciales. Así cuentan con dos despachos en las provincias pequeñas –el caso de Ávila– y 3 en las grandes, sala de reuniones, sala de espera, espacio de almacenamiento y dos aseos (al menos uno accesible).
Tal y como se traslada desde la Junta, se han adquirido locales en buen estado de conservación, con iluminación natural y/o artificial suficiente y que reúnen los requisitos básicos de accesibilidad para permitir su uso inmediato, tan solo con la realización de obras menores. Deben contar, además, con certificado de eficiencia energética y ser aptos para cumplir la normativa vigente contra incendios, todo ello para garantizar que estén en funcionamiento antes de fin de año cumpliendo, así, el plazo establecido.
Con 147 mujeres asistidas en toda la región, la atención la realiza un equipo multidisciplinar de profesionales especializados que prestan, de manera permanente las 24 horas de los 365 días del año, un servicio gratuito. Se trata de un recurso cercano, accesible y seguro para dar respuesta inmediata y coordinada ante un posible delito sexual a través de un acompañamiento de calidad a lo largo de todo el proceso, respetando siempre la última palabra de la víctima.
De este modo, cuando se demande asistencia por una persona que haya sufrido violencia sexual –sea reciente o en el pasado– o por un familiar o allegado, los profesionales activarán el protocolo de atención en centros de crisis. En ellos se ofrece información y atención especializada, tanto psicológica como jurídica, pero también acompañamiento social e incluso alojamiento urgente en situaciones críticas. Además, se van a llevar a cabo acciones de detección, prevención y sensibilización para evitar casos futuros de violencia sexual.
Asimismo, ya se está tramitando la convocatoria del próximo concierto, el cual dará comienzo el próximo 1 de diciembre, se prolongará durante dos años prorrogables por otros dos y recogerá ya la prestación en los nuevos locales.
Los centros de crisis presenciales se complementan con el Centro Virtual 'Atiendo', un recurso para llegar a todos los residentes en Castilla y León. La atención se completa con actuaciones en materia de formación, difusión, prevención y sensibilización de las violencias sexuales, a través de formación básica dirigida a los profesionales implicados en la atención a las víctimas.