La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (Csif) de Castilla y León exigió hoy a la Junta "pasar de las musas al teatro" y sentarse en una mesa a negociar un acuerdo salarial para los 91.000 empleados públicos, tras acumular una pérdida del 20 por ciento de poder adquisitivo. "Ayer, el consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, dijo que hay margen de negociación para la elevación salarial de los empleados públicos de la Junta. Me parece bien. Ya es hora que el Gobierno tome cartas en el asunto porque somos quienes desplegamos los servicios públicos esenciales y se dé cuenta de esta problemática que Csif lleva denunciando mucho tiempo", aseveró el presidente autonómico de Csif, Benjamín Castro.
Antes de encabezar una manifestación, que recorrió el centro de Valladolid, reivindicó una negociación "real" en todos los ámbitos y la convocatoria de las diferentes mesas generales en los tres niveles de administración. "Esto no puede seguir así. Estamos hartos de buenas palabras y de promesas vacías. Las plantillas están en cuadro, con un empleado que soporta el trabajo de cuatro, lo que genera un detrimento en la calidad de los servicios que reciben los ciudadanos", añadió.
Bajo el lema 'Sin presupuestos, sin negociación, sin derecho a un sueldo digno', más de medio millar de delegados venidos de todas las provincias de la Comunidad y algunos afiliados de Valladolid alzaron la voz contra el "bloqueo negociador" y el "inmovilismo" del Gobierno de España y la Junta que "castigan" a los trabajadores y "asfixia" los servicios públicos. Un "atasco" que, según el líder sindical señaló que , deja en el "limbo" la posibilidad de inyectar partidas económicas para reforzar las plantillas de los servicios públicos y lograr la equiparación salarial entre administraciones y territorios.
El manifiesto, que fue leído al finalizar la manifestación en la Plaza Mayor de la capital, recoge que los acuerdos de Diálogo Social no son suficientes si no se acuerdan en las mesas de negociación colectiva correspondientes. "Las leyes que garantizan la prestación de servicios públicos son papel mojado sin presupuestos que las sostengan, sin el refuerzo de plantillas, sin ofertas de empleo ambiciosas y sin medidas de conciliación efectivas", apunta el texto.
Entre otras medidas, Csif exige el refuerzo de plantillas, nuevas leyes de Función Pública, la recuperación de la estructura salarial previa a 2010, la carrera profesional para todos los empleados públicos y la jornada de 35 horas donde aún no se haya negociado.
Benjamín Castro denunció, según recogió la Agencia Ical, que la inflación acumulada en los últimos años agrava la pérdida de poder adquisitivo que en el caso del sector privado alcanza el 26 por ciento. Además, recordó que la media salarial en la Comunidad apenas alcanza los 1.700 euros brutos al mes, "muy lejos" de la de España, que ronda los 2.000 euros. Algo que es aún más alarmante al analizar el salario general de Castilla y León que se sitúa en torno a los mil euros, por lo que roza el SMI.
Y es que subrayó que los trabajadores de las empresas privadas también deben alzar la voz y tienen "sobradas razones" para manifestarse. Es por ello que demandó un alza salarial, la disminución de la jornada laboral semanal y medidas de conciliación familiar reales y el cumplimiento de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales.