Parada obligatoria en la ruta de la zona sur

M.M.G.
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El Mesón Karlos es, desde hace once años, una cita ineludible para los amantes del tapeo al más puro estilo abulense y, cada vez más, también para los grupos de turistas que visitan la ciudad

Parada obligatoria en la ruta de la zona sur

De norte a sur. De este a oeste. Cualquier lugar es bueno en Ávila y su provincia para disfrutar de su buena mesa. Lo llevamos comprobando cada lunes desde hace unos meses en esta 'Barra Fija' de la contraportada de Diario de Ávila, que hoy dirige su brújula al sur de la ciudad, para recalcar en el Mesón Karlos, un 'joven clásico' en la zona.

Porque son once años los que este mesón lleva con sus puertas abiertas para alegrar los paladares de los (muchos) que acuden a degustar los platos que cada día salen de su cocina.

Ya sea en la barra o en las mesas de su restaurante, los clientes del Mesón Karlos, a cuyo frente se sitúa Carlos Montero, encuentran platos deliciosos, de los que animan a repetir cada vez que se tiene ocasión.

experiencia. «Éste es el cuarto bar que tengo», nos habla Carlos de su experiencia en el mundo de la hostelería. Bares, por cierto, muy conocidos en su día en Ávila, como elCafé Bar, el Bar Piscis o el Snack.

Aunque ahora es en el Mesón Karlos («con K», nos dice, «por diferenciarnos un poco») desde donde alimenta y refresca a los abulenses aficionados a la buena mesa.

Abulenses y, por cierto, turistas. Porque a pesar de estar ubicado fuera del circuito turístico habitual de la ciudad, el boca a boca ha hecho que los que vienen a visitarnos no tengan inconveniente en caminar un poco hacia el sur de Ávila para comer bien y a buen precio en las mesas del Mesón Karlos.

«Y de la gente que viene de Ávila, hay de todo tipo», reflexiona Carlos. Jóvenes, mayores, grupos de amigos, parejas... Todos disfrutan en su barra del que Carlos define como «el pincho de la casa». Se trata de una magreta con queso, carne picado y pan macerado. «Y ahí es donde está el secreto», sonríe Carlos antes de confirmarnos lo que imaginábamos: no piensa desvelarlo. Como secreta es también la receta de la salsa de ali oli que emplean en sus champiñones a la plancha, otro de los bocados estrella de la barra. «La receta nos llega de mi abuela y lo cierto es que es muy especial», presume.

¿Y en la carta? ¿Qué encontramos en el Mesón Karlos?, le preguntamos. Pues buenas carnes preparadas a la brasa, asados, chuletones... Y, también, muchos platos de cuchara, con los que comenzar un festín que se sirve en un escenario de lo más castellano, al más puro estilo mesón.

Los que van al fútbol, a la plaza de toros a cualquier evento, aquellos que se acercan al barrio en las fiestas de verano... «Esta es una zona de alterne y la gente que viene hace la ruta», se refiere Carlos al hecho de tener como vecinos a otros cuantos bares muy conocidos también entre el público abulense. «Estar cerca nos beneficia a todos», reflexiona antes de despedirse de nosotros el hostelero.

Dirección: Camino del Cerezo s/n

Especialidad. El pincho de magreta con queso, carne picada y pan macerado y los champiñones con ali oli son dos de sus especialidades.

Horario: De 9,00 horas hasta el cierre.

ARCHIVADO EN: Ávila, Hostelería