Deportivo Arenas, Zona Norte, Quintanar Palacio, Las Navas, MilanAcademy Ávila, Real Ávila B, Cebrereña, Real Ávila, Ramacastañas, Atlético Candeleda o Colegios Diocesanos. Mucho fútbol, muchos partidos, muchas historias detrás de cada una de esas camisetas, de cada uno de esos escudos, pero todas ellas vividas al máximo sobre el césped. Porque así es José Antonio Muñoz González 'Josito'. «Cada camiseta, cada escudo, cada campo de fútbol tiene su historia, su riqueza particular y cuando te pones una camiseta la tienes que defender al máximo. Si he defendido tantas es por las ganas que siempre he puesto». Porque su fútbol partía del esfuerzo sincero, irreprochable. «El esfuerzo y el trabajo no se negocian». Nunca lo ha negociado. A sus 37 años –camino de los 38– lo mantiene. Y aún tiene carrete. «Hasta que el cuerpo aguante».
Abulense, de «toda esa Sierra de Gredos» de la que disfruta desde Navarredonda y que ha aprendido a apreciar y querer tanto como quiere al fútbol, un deporte en el que comenzó con siete años y en el que treinta años después sigue al pie del cañón. «Muchos clubes, muchos entrenadores, muchos partidos, pero sobretodo muchas amistades».Porque ha vivido muchos momentos en el césped. Recuerda los ascensos desde la Regional a Tercera con la Cebrereña, los playoffs de ascenso con el Real Ávila y espera «si todo va bien» el tercero con el Diocesanos este año. «He vivido ascensos, descensos, pero lo que de verdad me ha dado el fútbol, por encima de todo, son las amistades. Eso es lo que de verdad queda» y quedará cuando el balón deje de rodar.
Veterano del fútbol abulense –«ya llevo con esa losa muchos años»– es una de esas figuras que tanto valor dan a un vestuario cuando los más jóvenes empiezan a asomar no sólo como el futuro sino como el presente. «Siempre les pongo como ejemplo lo que a mi me pasaba. No hay que mirar si el entrenador te pone o no. Entrena, trabaja. Yo nunca empezaba la temporada como titular. Lo hacía en la cuatro, en la cinco, cuando el entrenador veía que trabajaba, que insistía. Y de ahí hasta el final». Se lo explica a sus compañeros y se lo enseña a aquellos pequeños a los que entrena. «Que aprovechen los entrenamientos, que aprovechen el tiempo que juegan, porque esto es muy bonito y nunca sabes cuándo no lo vas a tener.Que disfruten este momento».