El grupo municipal del Partido Popular en el Ayuntamiento de Ávila ha denunciado mediante una nota de prensa enviada a esta Redacción el «nulo interés real» de Por Ávila por «la estética» de la Semana Santa, que se celebra en una ciudad «patas arriba», y en ese comunicado su portavoz, Jorge Pato, ha afirmado que «en la Comisión de Urbanismo formulamos la necesidad de recoger en los pliegos de cláusulas de licitación de obras la obligación de paralización de estas y la retirada de todo elemento auxiliar en caso de coincidir con los recorridos de las procesiones, medida aplicada en ciudades que sí protegen su proyección turística vinculada a la Semana Santa».
Desde el PPse critica que «la improvisación y falta de planificación de Por Ávila a la hora de ejecutar obras a troche y moche hace que los abulenses tengan que celebrar las grandes fiestas con incomodidades y los turistas que nos visitan, llevarse la visión de una ciudad patas arriba», una situación que Pato considera que se agravará «en las jornadas festivas de la Semana Santa, en las que la afluencia se disparará en un centro histórico que presenta un estado caótico».
Pato recuerda que «llevamos meses advirtiendo lo que podía ocurrir y, por desgracia, ha ocurrido», producto de «los continuos retrasos en la ejecución de las obras» y la «falta de organización de las licitaciones, que dan lugar a que nuestra ciudad siga destartalada para los vecinos y dando la peor imagen a los turistas que llegan en Semana Santa».
El portavoz popular contrapone «la demagogia habitual, demostrada en el último Pleno municipal por el portavoz del equipo de gobierno, a cuenta de la subvención nominativa a la Junta de Semana Santa cuando decía que la concesión de fiesta de Interés Turístico Internacional es algo que 'puede peligrar' si no se ofrece la imagen que corresponde con un evento de estas características, con el nulo interés real de quienes gobiernan el Consistorio por la estética de Ávila, ni en Semana Santa ni en ninguna otra época».
Pato ejemplifica sus palabras con el «corte por obras» de calles «tan principales del casco histórico como El Tostado o Reyes Católicos», unas actuaciones que «dificultan la movilidad, perjudican a los negocios y dan mala imagen a los turistas, que ven que las procesiones transcurren entre acopios y casetas de obra en algunos puntos de sus itinerarios». Añade el «caos circulatorio» y los «numerosos problemas para peatones».
"Como venimos haciendo", el portavoz del PP se muestra "partidario de hacer una oposición constructiva y propositiva, que en este caso demostramos formulando en la Comisión de Urbanismo la necesidad de recoger en los pliegos de cláusulas de licitación de obras la obligación de paralización de estas y la retirada de todo elemento auxiliar en caso de coincidir con los recorridos de las procesiones, medida aplicada en ciudades que sí protegen su proyección turística vinculada a la Semana Santa". A esto habría que añadir "una mejor gestión política de las obras de la ciudad", ya que "las advertencias respecto a plazos de ejecución" es "casi una constante" que el teniente
de alcalde de Urbanismo y el concejal de Obras "ignoran de manera reiterada". "Previsión, planificación y la vista puesta en el futuro es lo que necesita nuestra ciudad para prosperar", concluye Jorge Pato.