La borrasca Jana tampoco ha pasado desapercibida en Peguerinos, donde a los daños causados la semana pasada por la nieve en el camping -desalojado por la caída de varios pinos- se suman ahora los devastadores efectos de la crecida de  los dos ríos que atraviesan ese término municipal como consecuencia de «las recientes lluvias y el deshielo», apunta la alcaldesa, Asunción Martín, en declaraciones a esta Redacción. «Han quedado destruidos el puente sobre el río La Parra y el de Navacuerda sobre el arroyo Chuvieco, el agua de la crecida ha saltado por encima de puente 20 ó 25 metros, quedando inutilizados los caminos por la fuerza del agua, que ha arrastrado piedras y árboles a su paso», lamenta. Esta situación afecta también al perímetro hidráulico de seguridad en torno al embalse de la Aceña sin que el Canal de Isabel II, «que tiene la encomienda de gestión pese a que su propietaria es la Confederación Hidrográfica del Tajo, haya tomado ninguna medida» pese a que el Ayuntamiento de Peguerinos así lo solicitara a primera hora de este lunes. 

Por si fuera poco, debido a las abundantes precipitaciones que ha dejado la borrasca Jana sumadas al agua que el deshielo llevó a los cauces de Peguerinos «han vuelto a derrumbar un camino que también quedó dañado tras la DANA de 2023 y que había sido reparado recientemente», explica Asunción Martín. La preocupación de la alcaldesa es, si cabe, mayor en este caso porque ese camino es el acceso principal a la urbanización La Solana, que cuenta con una decena de segundas residencias, cuyos propietarios «no pueden llegar hasta sus casas», destaca. «Tampoco pueden acceder a sus fincas para atender al ganado varios ganaderos que habitualmente usan ese camino» en sus tareas diarias, añade Asunción Martín, que urge una solución al bloqueo que sufre este acceso. 

 «Los daños son cuantiosos, el Ayuntamiento de Peguerinos no puede asumir todas las pérdidas, así que vamos a pedir la antigua declaración de Zona Catastrófica», ahora denominada Zona afectada gravemente por una emergencia de Protección Civil.

No obstante, la responsable municipal insiste en que lo más urgente es que el Canal de Isabel II tome cartas en el asunto con premura para reparar «el camino perimetral que bordea el embalse de la Aceña y el otro camino, que han quedado destrozados y que representan un peligro», destaca.