El puchero de referencia

M.E
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El Pucherito, un clásico de la zona sur de Ávila, fue uno de los pioneros de la comida casera a domicilio y hoy, veinte años después, sigue a pleno rendimiento con una variada oferta y platos que nunca fallan, como sus paellas, el pollo asado o la

El puchero de referencia - Foto: Isabel García

PAELLA, pollo asado, albóndigas, revolconas.... imagínese poder degustar en su mesa comida casera preparada con ingredientes naturales por cocineros profesionales con una amplia experiencia en los fogones y a un precio asequible. Pues eso es lo que lleva ofreciendo desde hace algo más de veinte años 'El Pucherito', un clásico de la ciudad de Ávila que sigue al pie del cañón con el cocinero Jesús Rodríguez Sánchez al frente y el resto de su equipo, otras tres personas, entre ellas su mujer, Oriella, también cocinera profesional.

'El Pucherito' fue uno de los establecimientos pioneros de la comida preparada a domicilio en Ávila, allá por el año 2004, y desde el local de la calle Capitán Peñas se trasladaron a la zona sur, donde se asentaron. Su filosofía no ha variado en este tiempo: servir comida casera tradicional, con especial atención a la cuchara, para recoger en el local. 

Tienen clientela fija, de diario y para ocasiones señaladas, y de alguna forma «hacemos una labor social, al preparar comida para gente que vive sola o que no tiene tiempo para cocinar y que viene a por su menú del día», destaca Jesús Rodríguez.

Su trayectoria le avala. Este morañego volvió a Ávila después de más de veinte años en Madrid, donde trabajó con los mejores cocineros y en los mejores restaurantes, como el del Casino de Madrid que entonces dirigía Ferrán Adriá y donde sirvió a personalidades importantes de la capital. De aquel tiempo recuerda con cariño la cena de gala previa a la boda de los entonces Príncipes de Asturias, en la que trabajó junto a otros 35 grandes chefs. Pero  esa etapa se acabó y decidió volver a su  tierra, primero como jefe de cocina de un hotel de la ciudad y después con 'El Pucherito', con el que empezaron «por no irnos de aquí».

Su mano en la cocina, sus recetas y la «constancia» han convertido al negocio en toda una referencia. «La gente nos conoce y sabe a lo que viene, a por comida tradicional, rica y reciente. Tenemos una carta amplia y variada, con menús, platos sueltos y postres», y aunque no siempre tienen todo, se puede encargar. ¿Cuál es el plato que no falla?, le preguntamos. «La paella, las revolconas y el pollo asado no fallan, pero tampoco las carrilleras, filetes rusos, macarrones, albóndigas...».