Los Canteros, cocina de producto y de cercanía

E.C.B
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Al frente de este establecimiento, abierto en 2008, están David Ramos y Sonia Escribano, que han sabido dar a su cocina un toque de autor y de modernidad, aunque siempre basándose en "la cocina de antes"

Los Canteros, cocina de producto y de cercanía - Foto: Isabel García

Una cocina de producto y de cercanía, elaborada en el puchero, la cazuela de barro y el horno de leña. Son las señas de identidad del restaurante Los Canteros, de Mingorría, que recuerda con su nombre a un oficio artesanal propio de esta tierra que poco a poco se ha ido perdiendo.     

Al frente de este establecimiento, abierto en 2008, están David Ramos y Sonia Escribano, que han sabido dar a su cocina un toque de autor y de modernidad, aunque siempre basándose en «la cocina de antes, en la que todo toca la brasa, con productos fundamentalmente de Ávila», explica David, quien añade que «intentamos que la gente venga a este pueblo a buscar una gastronomía pura, auténtica, ofreciendo además un poco de 'show cooking', a la vista del cliente».

«En el horno de leña tenemos la trilogía de los asados, cordero, cabrito y cochinillo, y luego en temporada navideña asamos pavos o algunas sugerencias como jamón de cerdo asado o faisán», indica el chef, quien recuerda que «también hacemos arroces con pichones y con conejo, intentando rememorar esos arroces que hacían antiguamente las personas mayores, y luego tenemos las carnes, sobre todo de Avileña-Negra Ibérica, pero también buey, vaca vieja, lomo de potro, wagy?, angus o lidia».

Cuentan con una amplia carta, si bien también disponen de un menú degustación y entre semana, el menú de la abuela, un poco más económico.

Un negocio familiar situado en un edificio que antaño fuera molino de motor y después, ya en manos de su familia, bar e incluso discoteca, y que actualmente es un restaurante de referencia, con capacidad para 100 comensales, completamente accesible y que abre de miércoles a domingo, con todo el encanto propio del mundo rural, en el que, como dice David, «me encanta trabajar».