Decenas de jóvenes músicos que están estudiando en el Conservatorio Profesional de Música Tomás Luis de Victoria de Ávila celebraron la tarde del martes, con la participación y apoyo de sus profesores y el acompañamiento de familiares y conocidos que ocuparon una buena parte del aforo del salón del auditorio del centro, el Concierto extraordinario de fin de curso, una cita variada y atractiva que se dilató durante alrededor de una hora y que a todos los presentes les resultó muy amena.
Se abría el programa de este recital, lleno de emoción para los jóvenes intérpretes, con la actuación de los coros de 3º y 4º de Enseñanzas Elementales, que interpretaron, jugando en algún momento también con la coreografía, los temas Por esto cantamos juntos, Dodi-Li, A cold my nose, Kusimama y There is peace, para dar a continuación paso al grupo de violas, que ofreció Modo perpetuo, Danza alemana y The devil's dream.
Ocuparon luego el escenario un quinteto de cellos, que ofreció la Suite Capriol, de Warlok, y Basse-Danse-Pavane, y la Orquesta Piccola (formada por alumnos de Enseñanzas Elementales de cuerda) que interpretó Agent 440 y The boogie man blues, para cerrar esta jornada vespertina, que tuvo muchos aplausos por parte del público, mucha alegría entre los jóvenes intérpretes y mucha satisfacción por ambos lados, con la banda de Enseñanzas Elementales haciendo sonar Tequila, I got you (I feel good) y Seven Nation Army.