Editorial

Un llamamiento urgente a la solidaridad de los más jóvenes

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Ávila ha sido siempre una tierra solidaria y hay cientos de ejemplos de ello. El último, sin ir más lejos, ayer mismo, con la I Carrera Solidaria en favor del Grupo de Enfermos Alcohólicos Recuperados Abulenses (Geara), en la que se reunieron más de 700 personas, todo un éxito teniendo en cuenta que se trata de la primera edición de esta actividad que ojalá que haya venido para quedarse, lo que viendo el éxito de convocatoria en su primera cita, no parece para nada desechable. 

Está más que demostrado que ante cualquier llamada a la solidaridad, ya sea urgente o recurrente, la sociedad abulense tiene siempre una respuesta inmediata, de ahí que haya que resaltar, en este caso por lo negativo, la situación que atraviesan las reservas de sangre en la provincia, una necesidad que quizá algún día tengamos que utilizar todos, por nosotros mismos o por familiares, lo que ha de servir para tener una concienciación mayor.

Esta semana ha habido una jornada de donación en el Ayuntamiento de Ávila, y en ella desde la dirección de la Hermandad de Donantes de Sangre de Ávila se dio la voz de alarma porque no hay relevo generacional. Faltan jóvenes que recojan el testigo de quienes llevan años poniendo su brazo, y ese sí que es un problema serio que hay que analizar y atajar, porque nos estamos jugando el futuro de este gesto solidario.

Más allá de la necesidad de reemplazar por personas de más edad, quizá sea el momento de que la propia Hermandad se replanteé la necesidad de encontrar nuevas fórmulas para  incentivar esa renovación. Está demostrado que las jornadas de donación fuera de la sede habitual ubicada en el complejo hospitalario Nuestra Señora de Sonsoles funcionan de una manera bastante positiva, así es que por ahí puede encontrar la organización una manera de lograr donaciones extras que palíen las carencia que se vienen denunciando.

Pero también es momento para que los jóvenes abulenses, den un paso hacia adelante y demuestren que también en esta faceta emerge su faceta solidaria. Si juventud es muchas veces sinónimo de solidaridad y compromiso, responder a la llamada de le Hermandad de Donantes es una buena ocasión para demostrarlo. En los actuales tiempos es cierto que el sector más joven de la sociedad se muestra comprometido con cuestiones relacionadas con el ecología, la igualdad de genero o las desigualdades sociales y en esos puntos parece centrar su lucha y esfuerzos, pero conviene no olvidar otras cuestiones más 'tradicionales' y redistribuir esfuerzos que pueden tener iguales e incluso mejores recompensas en ese objetivo de todos, pero especialmente de los jóvenes, de hacer de este un mundo mejor.