Buena acogida al nuevo espacio de estudio

M.R
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Las aulas acondicionadas por el Ayuntamiento de Ávila en los antiguos lavaderos del Pradillo, que ofrecen 36 puestos y acaban de estrenarse, de momento son usadas principalmente por opositores

Buena acogida al nuevo espacio de estudio - Foto: Isabel García

La falta de espacio en las bibliotecas públicas, sobre todo en las épocas de exámenes en las que hay mayor demanda, llevó al Ayuntamiento de Ávila a convertir los antiguos lavaderos de El Pradillo en un aulario destinado exclusivamente al estudio que incluso ahora, cuando está dando sus primeros pasos, ya está teniendo buena acogida entre la población. Así lo asegura la teniente alcalde de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Ávila, Paloma del Nogal, quien explica que en la actualidad sus usuarios son sobre todo  «personas de entre 20 y 35 años que están preparando oposiciones», si bien es cierto que «las universidades están en las primeras semanas del curso, seguramente en época de exámenes vengan más universitarios» a las nuevas aulas de estudio de El Pradillo. 

De hecho, uno de los objetivos es que el horario de apertura del espacio recién estrenado -que en la actualidad es de ocho de la mañana a nueve de la noche de forma interrumpida de lunes a domingo- llegue a ser «las 24 horas del día», principalmente para dar ese servicio a los estudiantes universitarios «en épocas de exámenes», apunta del Nogal. 

Los 360 metros cuadrados de superficie ofrecen 36 puestos de estudio, a los que es tan fácil acceder como darse de alta en un link para reservar la plaza y renovarla cada dos horas (en la web reservas.avila.es). «Esa aplicación te facilita un código que te permite el acceso a las aulas de estudio porque tienes que meterlo para poder abrir la puerta», detalla la teniente alcalde de Servicios Sociales. Cada reserva se realiza para una mesa concreta en la sala de estudio, siendo el usuario que realiza la misma el responsable del buen uso de las salas, además de tener que registrar tanto la entrada como la salida, para poder continuar haciendo uso de este espacio.

Además de los citados 36  puestos de estudio, este espacio dispone de una sala para grupos, una zona de control de acceso y un almacén general, aparte de los baños y del control de accesos. Personal municipal y videovigilancia completan los servicios que ofrece, si bien la autogestión del espacio a través de la tecnología es fundamental en su uso.