Santa Marta.
Del Río; Tena, Rivas, Santos, Álvaro (Richard, 59'), Chopi (Tomi, 59'), Omar (Asensio, 80'), Villardón, Cascón,Astu (Joel, 80'), Mito.
Real Ávila.
Álvaro; Ibra (Paco Benítez, 65'), Carlos Pascual, Alpha, Toper (Llorián, 89'); Tena, Álex Moreno; Alberto Martín (Simón, 89'), Jorge Campos, Fer Albín, Shergo (Fer Díaz, 76').
Goles.
0-1 (31') Shergo. 0-2 (79') Tena. 0-3 (85') Jorge Campos
Árbitro.
Maté Rincón.
Mostró cartulinas amarillas a los tomesinos Astu, Cascón y Mito, y a los encarnados Alpha, Tena, Ibra, Álex Moreno.
Incidencias.
Partido correspondiente a la jornada 32ª del Grupo VIII de Tercera disputado en el Alfonso San Casto con cerca de medio millar de aficionados abulenses.
El Real Ávila se quedó con las ganas de ser campeón en Santa Marta y celebrar el ascenso cuando ya lo saboreaba.Cumplieron los encarnados, como debían. Golearon a los tormesinos en un partido en el que fueron muy superiores a los locales bajo una tarde de intensa lluvia pero en la ecuación para ser ya campeones falló una variable, la que no podían controlar los encarnados, la del Salamanca UDS, que caminó en el Sancti Spíritu sobre el alambre del empate durante muchos minutos alimentando las esperanzas de todos de un ascenso por adelantado que finalmente impidió con su victoria en los últimos minutos. Esta vez no pudo ser, pero el domingo ante La Virgen del Camino los encarnados tendrán una nueva oportunidad. Y esta vez no dependerán de nadie. Si ganan, serán campeones. La espera habrá merecido la pena.
Fue un inicio nervioso por todo. Por lo que había en juego y por una granizada inoportuna que tiñó de blanco el césped del Alfonso San Casto obligando a demorar el inicio del partido 15 minutos. La espera alimentó la ansiedad de todos, especialmente los encarnados y su hinchada, numerosa sabiendo lo que se jugaban los suyos y lo mucho que podían conseguir si todo salía bien. Arreciaba la lluvia sobre el verde mientras los tormesinos trataban de hacer suyo su campo, un Alfonso San Casto donde se manejan más que bien, aunque la primera ocasión se la apuntó Tena –minuto 8– con un lanzamiento desde fuera del área que acabó en córner sin consecuencias. Medían sus fuerzas los equipos sobre el césped y arrancaba una nueva granizada. Incómoda, como el comienzo de un Real Ávila que no terminaba de encontrar su sitio. Los encarnados, que tenían en Jorge Campos su mejor exponente, necesitaban más de Álex Moreno, Toper y Alberto Martín. Tiempo al tiempo.
Puso Maté Rincón la vara de medir muy alta desde el arranque. Pronto vieron la amarilla Alpha y Astu mientras Tena se desesperaba cuando cada choque y derribo lo señalaba el colegiado. No todo contacto es falta suele decirse en el fútbol de calle, en el que habría sido gol el tanto de Fer Albín tras una chilena ortodoxa de Jorge Campos que el salmantino supo rebañar tras el rechace en el segundo palo para mandarla al fondo de la red. Quedó anulado. La respuesta la ofreció el Santa Marta –minuto 23– en un remate de espuela de Álvaro al lateral de la red que se cantó gol cuando no lo era. Susto serio y ocasión –la única de los tormesinos en la primera mitad– realmente clara. Como la que tuvo Alberto Martín –minuto 28– cuando Santos quiso sacarla jugando y en el círculo central se tropezaba ante Shergo para perderla, dejando vía libre a la contra. Se la quiso liar Alberto Martín a Omar en el área pero en la bicicleta se dejaba el balón atrás. Quiso resarcirse el salmantino con un buen lanzamiento desde fuera del área que obligó a Del Río a despejar a córner. Yel córner fue el origen del gol. Al saque Toper. El 'nuevo' lateral encarnado la colgaba al corazón del área donde Shergo se hacía gigantesco. Se elevó por encima de todos y la remató picada donde Del Río no podía llegar.Era el 0-1 a la media hora de partido. El '9', que comenzó cuestionado tras su llegada en el mercado de invierno, está siendo clave en la consecución del campeonato. Cuatro goles en los últimos tres partidos, tres de ellos tras centro de Tóper. Poco más se puede decir.
El tanto dibujó un escenario diferente para un Real Ávila mucho más seguro ante un Santa Marta que empezaba a empantanarse con balón y sin él. Cada córner era una clara oportunidad y se quedó Jorge Campos con las ganas de ampliar distancias pero estaba en claro fuera de juego cuando batía a Del Río con la zurda.
Si el partido comenzó con un Santa Marta discutiendo el balón a los encarnados, el paso de los minutos y el gol relanzó a los encarnados, que se veían superiores a su rival, superado por la intensidad de un equipo que mordía ante cada balón. Tena, Fer Albín y Jorge Campos, que no sólo suma sino multiplica, estaban en todas. Y con un Real Ávila que manejaba los ritmos y los tiempos se llegaba al descanso mientras en Sancti Spíritu el Salamanca UDS no pasaba del empate. En estos momentos el Ávila era campeón. Aún quedaba mucho como para pensar en ello.
Comenzó la segunda parte con el Santa Marta tratando de entrar en calor en una tarde de perros. Como en el arranque de la primera, el inicio de los tormesinos estuvo repleto de buenas intenciones, como el remate del Álvaro, que quiso sorprender a su 'tocayo' por arriba. El encarnado libraba la ocasión agarrando el balón antes de que superara la línea pero el cuerpo tras la cal en un Alfonso San Casto que empezaba a encharcarse. Porque el partido seguía bajo una intensa y constante lluvia.
Tuvo la oportunidad –minuto 52– de sentenciar el partido Jorge Campos cuando Toper lanzó una falta desde la banda y salvando el fuera de juego el '16' la mandaba fuera de cabeza con todo a favor. Mantenía el Real Ávila el control de un partido. Empujaban los de Miguel de la Fuente, a remojo junto al banquillo tras la roja ante el Diocesanos.
Buscó más energía Alonso Fernández entre los suyos con Tomi y Richard, un enérgico verso suelto. Se pasó de energía Ibra en la frontal cuando quiso robarle el balón a Astu y Mito –minuto 63– lanzó la falta al segundo palo obligando a Álvaro a estirarse hasta lo imposible para impedir el gol.Eran los minutos más complejos para los encarnados, que olieron el peligro como no lo habían olido hasta ese momento. Las últimas jugadas habían reactivado a un Santa Marta que inquietaba a un Real Ávila que había perdido la iniciativa. Se encomendaban los encarnados a Álvaro. Nueva mano salvadora –minuto 70– en un nuevo lanzamiento de falta de Mito que buscó peligrosamente el palo largo.
Entraba el partido en los últimos 10 minutos demasiado abierto.En un terreno siempre peligroso, Tena, viejo conocido de un Alfonso San Casto donde se fogueó de joven, lo aclaró todo. Nuevo saque de córner a los pies de Tóper, que la lanzó al corazón del área donde esperaba Tena ante la pasividad local. Cabezazo impecable. Porque el centrocampista encarnado cabeceó a la cruceta para sentenciar el partido (0-2) y desatar la locura en un campo y banquillo que se veían campeones. Lo celebraron con rabia.Porque en esos momentos el Salamanca UDS empataba en el Sancti Spíritu. Era un gol con un enorme valor, hasta que los móviles empezaron a vibrar en la grada y los bolsillos de todos. Porque el Salamanca UDS hacía el 0-1.El ascenso quedaba aplazado. Y aunque la noticia llegó al campo, siguió el equipo a lo suyo. Empezando por Jorge Campos, que había merecido el gol mucho antes –lanzó una chilena al larguero– y lo encontró en la recta final en un nuevo remate de cabeza en el área para firmar el 0-3 y certificar un triunfo que coloca a los encarnados con pie y medio en Segunda RFEF. Depende de ellos.