Los fieles no faltaron a una de las citas con más solera de la Semana Santa abulense: el vía crucis penitencial alrededor de los 3,5 kilómetros del perímetro de la Muralla, que en los dos últimos años se había realizado en el interior de la Catedral debido al mal tiempo y que este Viernes Santo sí pudo hacerse en el recorrido habitual, aunque a un paso mucho más rápido que de costumbre. El Ilustre Patronato de la Santa Veracruz sabía que la previsión meteorológica anunciaba lluvia para las siete de la mañana, así que la premisa era acelerar el ritmo de la procesión en la medida de lo posible para evitar que la bellísima imagen del Cristo de los Ajusticiados pudiera sufrir ningún daño al mojarse.

Dos capuchones ataviados con la indumentaria morada de la cofradía abrían la comitiva, formada por dos hileras de personas perfectamente ordenadas, una a cada lado de la calle, precediendo a la imagen, que salió de la Catedral a las seis menos veinte de la madrugada portada por cinco cofrades. Centenares de devotos cerraban el recorrido penitencial marchando detrás del Cristo de los Ajusticiados, muchos con los auriculares puestos y el dial de COPE Ávila sintonizado porque, un año más, la emisora retransmitió el vía crucis para toda España a lo largo de las catorce estaciones de penitencia que lo conforman, aunque había megafonía acompañando el recorrido para que todos los asistentes pudieran seguir el rezo en directo.

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