La intención es romper cualquier barrera a la hora de aprender, en este caso con el mundo rural por bandera. Así se desarrolla el programa Ruralbotic, que busca acercar la tecnología a los entornos rurales a través de la robótica educativa y que este curso llega a través de la Fundación Asti, de la mano de la Junta de Castilla yLeón y la Diputación de Ávila, a un centenar de alumnos de la provincia, que este jueves disputaron la final. El programa, de carácter anual, utiliza la robótica educativa para fomentar las vocaciones científico-tecnológicas entre el alumnado de l aEspaña rural y favorecer la igualdad de oportunidades. De esta manera se favorece la igualdad de oportunidades entre los niños con independencia de su municipio de residencia y se lucha contra la despoblación.

Andrea Picón, coordinadora de robótica educativa de la Fundación Asti, explicó antes del último acto en las instalaciones de Naturávila que es la segunda final que se realiza en Ávila con un programa que este año ha contado con ocho CRA (Centro Rural Agrupado) de la provincia, con más de cien niños. En la final se contó con 25 escolares y tres de estos centros, que eran Alto Tiétar, Fuente Adaja y Los Regajales, que pudieron disfrutar de una jornada con diferentes pruebas, las que fueron realizando a lo largo del programa, tales como laberintos, representación de figuras, un 'siguelínea's o una competición de sumo. El torneo es el broche final para los alumnos y se hace a través de la usperación de esas pruebas, pniendo a prueba los robots y poniendo en práctica los conocimientos que han ido adquiriendo

Para poner en marcha este programa se comienza con la formación al profesorado, para que luego puedan llevar a cabo la parte práctica a través de una «competición sana» con la que disfrutar y mostrar lo que han aprendido con la robótica educativa. Y «no sólo de robótica educativa, sino de programación, de compañerismo, de lógica computacional. Lo más importante es que lo disfruten y sepan que tienen esa posibilidad independientemente del lugar donde les haya tocado, independientemente del código postal», señaló.

Pero llegar a este punto es verdad que cada centro aplica el temario de forma diferente, con seis temas pero que cada profesor lo lleva a cabo «a su manera», sin que haya una obligación de seguir con el orden de temas, sino adaptándose a los niños, alumnos de Primaria, principalmente de cuarto, quinto y sexto.

El delegado de la Junta de Castilla y León en Ávila, José Francisco Hernández Herrero, señaló que estas actividades son reflejo del «esfuerzo que se está haciendo en Castilla y León», con las diferentes entidades implicadas y la «joya» del Centro Rural de Innovación Educativa de Naturávila, y que se ve en un «programa absolutamente innovador» que enlaza además en el programa «de talento y refuerzo educativo de nuestra comunidad educativa en el que están implicados, no solamente a nuestros alumnos, sino nuestros magníficos docentes para seguir teniendo a la educación de Castilla y León en el top del ranking de todas las comunidades autónomas que mejor educan». Además, añadió que se habla de robótica en este caso como puede ser también la implantación de asignaturas STEM, es decir, ciencias, tecnologías, ingeniería y matemáticas, como «una palanca para todos los niños, especialmente los niños que estudian en el medio rural, para tener mejores opciones, para tener más capacidades y como complemento a toda la educación», con incremento también «en el número de becas».

El diputado responsable del área de Cultura, Patrimonio, Juventud y Deporte, Javier González Sánchez, se encargó de dar la bienvenida a las instalaciones de Naturávila, de la Diputación de Ávila, donde se reciben a «niños de toda la provincia», en este caso a través de la iniciativa de robótica, que «es muy importante que se acerque al mundo rural».

Ruralbotic ha cumplido este año su tercera edición en Castilla yleón, con la participación de más de 300 niños de 17 centros rurales agrupados de Ávila, Burgos y Palencia.