En el número 10 de la calle Vallespín, muy cerca del Mercado Chico, se ubica El Convento, una cafetería restaurante detrás de cuya barra está desde hace 18 años, 9 de ellos como socio único, David Martín. Una dirección hostelera muy recomendable para quienes quieren degustar cocina tradicional y casera tanto en carta como en barra. Pero también para quienes quieren empezar el día con un buen desayuno a base de churros y porras, bocadillos, pinchos o tostadas. De hecho, El Convento es parada obligada para muchos trabajadores de la zona, en especial empleados de la administración, que eligen este  establecimiento para desayunar por la calidad y variedad de su oferta, y también por el trato cercano y familiar.  

Debido a su céntrica ubicación también es frecuente que El Convento sea frecuentado por turistas que aquí tienen una muy buena oportunidad de degustar la gastronomía tradicional abulense y además de hacerlo con comida casera. 

Judías del Barco, sopa castellana o patatas revolconas son solo algunos de los primeros platos que los comensales de esta cafetería restaurante pueden elegir para comer y completar después con un segundo entre los que no falta un buen chuletón. En El Convento se puede comer tanto a la carta como optar por menú diario cuyo precio oscila entre los 14 y los 30 euros, dependiendo de la elección de los segundos platos. 

Y también casera es la oferta de tapas en barra, tanto las que se ofrecen frías, donde triunfan el bacalao en vinagreta o la oreja hervida en vinagreta de pimentón, pero también calientes, entre las que no faltan la tortilla de patatas o los callos, que en este negocio hostelero tienen mucha demanda.

Lo cierto es que a la hora de tapear El Convento lo pone difícil teniendo en cuenta que diariamente aquí se ofrecen una veintena de tapas, cada cual más apetecible y siempre bajo esa premisa de cocina casera y tradicional. 

A excepción de los fines de semana, cuando tanto el Mercado Chico como calles cercanas como Vallespín, adquieren más actividad vespertina y nocturna, lo cierto es que en esta zona de la capital abulense, y también lógicamente en El Convento, lo que triunfa es el tapeo a mediodía, que es cuando más clientes, tanto habituales como de paso, y en este caso en su mayoría turistas, se dan cita en este local para disfrutar de una animada charla o de unas risas mientras acompañan su consumición con una tapa de cocina. 

Aparte de su céntrica ubicación, y de ese trato cercado y profesional, otro de los atractivos de esta cafetería restaurante es su terraza exterior que completa el aforo de un local que en su interior también cuenta con varias mesas para ofrecer ese servicio de restaurante donde los sabores de Ávila son protagonistas de toda la carta.