Almudena García Drake afronta su tercera legislatura consecutiva como alcaldesa de San Esteban del Valle y la que, si se cumplen sus intenciones, será la última. En esta entrevista habla sobre el presente y el futuro de esta localidad.
En las últimas elecciones municipales volvió a conseguir el voto mayoritario de tus vecinos. ¿Cuáles cree que fueron las claves?
Yo creo que fue el trabajo de la anterior legislatura. La primera legislatura, recuerdo, como llevaba mucho tiempo ya viviendo en el pueblo y había tenido un negocio de turismo rural, la gente me conocía, pero no era del pueblo. Y cuando me presenté a esas primeras elecciones en 2015, creo que la gente no sabía todavía qué es lo que yo podía hacer y gané por once votos únicamente. En la siguiente legislatura ya saqué cinco concejales porque la gente pudo ver el trabajo que se hacía en el Ayuntamiento, y eso lo volvimos a revalidar en esta tercera, quizás porque hemos buscado proyectos que realmente ilusionaran para el futuro de San Esteban y la gente lo entendió así.
Siempre hemos tenido la intención de atender el día a día de la gente, las cosas importantes, lo que les puede afectar más, y bueno, revalidamos otra vez esos cinco concejales que fue algo importante, porque podía haber habido un desgaste y no lo hubo.
Yo, esta tercera legislatura no tenía ganas de presentarme, estaba muy desilusionada por cosas graves que habían acontecido en el municipio, como el incendio, el fallecimiento de una persona en las fiestas, el primer día de los encierros, y un derrumbe en un edificio… cosas que son ajenas, pero que te dejan una amargura, y la COVID. Estaba muy desinflada, pero hubo un grupo de gente joven que quiso ponerse conmigo al frente para rematar algunos de los proyectos importantes que teníamos entre manos y esa energía me dio las ganas de volver a presentarnos, y fue muy ilusionante la campaña y muy ilusionante ver que la gente volvió a confiar en nosotros.
¿De qué proyectos hablamos?
Son dos proyectos que todavía están viendo la luz, la construcción de la residencia y centro de día, y la comunidad energética local, que son dos proyectos importantes para que el pueblo pueda tener una esperanza de futuro. El primero va a permitir que nuestros mayores, en lugar de tenerse que marchar, puedan seguir viviendo aquí con un movimiento de familiares y de vida en el pueblo, y hay que subrayar también los puestos de trabajo directos e indirectos que eso va a crear. Y luego la comunidad energética local supone apostar por una eficiencia energética en la producción de la energía y sobre todo en esas facturas de las pequeñas o medianas empresas que tenemos en el pueblo, del propio Ayuntamiento y de los vecinos.
Hemos vivido unos momentos tremendos con el precio de la energía y no sabemos qué es lo que va a volver a pasar, pero podemos asegurar que todo el mundo va a tener una factura más barata y eso es importante y promoverlo desde el Ayuntamiento nos parecía algo por lo que teníamos que apostar.
La construcción de la residencia y centro de día, ¿en qué punto se encuentra actualmente?
Pues por fin, después de muchísimos años, el próximo 24 de junio se reiniciarán las obras. Primero hubo un proyecto para hacer un centro cívico, pero quebró la empresa. El Ministerio tenía un compromiso patrimonial con San Esteban y cuando yo inicié la primera legislatura retomé aquello, pero nosotros no queríamos ya un centro cívico, sino una residencia, porque las cosas habían cambiado y las necesidades del pueblo eran otras. Conseguimos que el Ministerio entendiera nuestra propuesta, sobre todo con el tema del reto demográfico y nuestro proyecto fue casi cogido como una muestra de lo que se podía hacer en un pueblo apostando para revertir la situación de despoblación.
El año pasado, prácticamente por estas fechas, se iniciaron las obras por fin, pero hubo un problema cuando iniciaron la cimentación, con un nivel freático de agua que no correspondía con lo que estaba en el estudio geotécnico hecho, y ha estado la obra paralizada un año. Y ahora volvemos otra vez al cabo de un año, el día 24 de junio, a reiniciar las obras, ya con esa modificación del proyecto de cimentación aprobada, y son 18 meses de ejecución, por lo que esperamos tenerla terminada en ese plazo y luego poder licitar la gestión de la residencia para ponerla en marcha.
Hace apenas unos días conocíamos que se había instalado la primera instalación fotovoltaica para producir y consumir energía 100% renovable en el municipio. ¿Es el primer paso de esa comunidad energética?
Es la primera fase. A nosotros nos consideran un caso de éxito porque en el Ayuntamiento, con los fondos europeos, ya estábamos presentando proyectos para la eficiencia energética del municipio, pero fue un boom en todos los ayuntamientos y no había técnicos que elaboraran los proyectos, y entonces el tema de la fotovoltaica se nos quedó un poco aparcado. Gracias a eso surgieron las comunidades energéticas y realmente en el equipo de gobierno pensamos que era una oportunidad y contactamos con una empresa inversora y lanzamos la oferta al municipio y fue apabullante, porque prácticamente el 100% de la población se ha apuntado a la comunidad energética.
Hemos constituido y registrado la cooperativa y ahora hemos empezado la primera fase. Ya están prácticamente instaladas las placas y en cuanto esté hecho el enganche, 54 vecinos, incluido el Ayuntamiento, van a empezar a beneficiarse de esta primera fase. Luego, más de 200 entrarán en la segunda fase y habrá una tercera para incluir la futura residencia.
¿En que otras obras se viene trabajando?
Nosotros tenemos un problema serio con el agua, con las conducciones de agua. Después de que ha entrado en funcionamiento la EDAR, que recoge las aguas fecales de los cinco municipios, se detectó que todos tenemos una red que es unitaria, no tenemos separada el agua sucia del agua limpia. Entonces ahora todas las obras que se tienen que hacer hay que hacerlas con esa visión de ir separando las aguas para que la EDAR sea realmente eficaz.
Y muchas calles del municipio están en un estado un poco lamentable. Por un lado estamos esperando que se termine la obra de la residencia porque afecta a una de nuestras vías principales, pero luego sí que hay calles. Esas cosas que los vecinos agradecen, que son las cosas del día a día, porque hay gente mayor y la movilidad cada vez es más complicada, por lo que hay que ir arreglando al menos una calle cada año. El principal problema es que económicamente no somos autosuficientes, dependemos de subvenciones y de los impuestos que compartimos con el Estado, pero eso no es suficiente y en cuanto nos surgen otras cosas, por ejemplo el robo de todas las herramientas municipales que hemos sufrido este año por valor de 30.000 euros, supone un descalabro en los presupuestos y una dificultad para poder atender otras necesidades, como la limpieza de las calles, el mantenimiento del colegio o un espacio para actividades culturales.
¿Qué situación económica tiene el Ayuntamiento?
Hemos salvado el año con un superávit justito, porque desde la COVID venimos soportando una serie de gastos sin contar con apoyo, como el derrumbe de un edificio, que hubo que invertir 72.000 euros, y compramos dos edificios para poder desarrollar actividades culturales y estamos pagando 2.200 euros al mes. Pero el Ayuntamiento está saneado y pagar ese crédito que tenemos pedido, y este año que vuelve a aplicarse la ley de estabilidad presupuestaria, hay que amarrarse todo lo que podamos. Ahora tenemos por delante las fiestas, con un desembolso grande, y hemos hecho una reunión con todos los vecinos para explicarles cuál era la situación real, qué gastos nos habían descolocado un poco y cómo teníamos que afrontar las fiestas entre todos, con colaboración, para reducir ese margen y poder llegar a fin de año pudiendo acabar de hacer otras cosas, porque las fiestas son importantes, pero hay otras cosas en el municipio que también hay que atender. Tuvimos muy buenas respuestas de la población.
¿Qué política está siguiendo en materia de tasas e impuestos?
Pues la verdad es que hemos renovado algunas que llevaban desde el año 80 sin modificarse, y ha sido casi un pequeño redondeo. No nos hemos planteado otro tipo de modificaciones y veremos a ver cómo vamos llegando a diciembre para plantearnos el IBI del año que viene. Este año ha entrado en funcionamiento la EDAR y ya dentro de nada va a empezar a pasarse la primera tasa por depuración de agua, que era algo que antes no repercutía en los vecinos.
Yo creo que se puede aguantar hasta donde se puede aguantar porque aquí la mayoría de las personas son jubiladas y hay pequeñas empresas. Por eso lo de la luz era una idea que nos parecía importante, algo en beneficio de todos los vecinos. Y lo de los impuestos, a lo mejor hay que ajustar esa medida en la que un poquito de todos suponga algo más para las arcas municipales, aunque creo que con esta decisión de lo de las fiestas, nos va a suponer ese colchoncito pequeño que necesitamos.
¿Qué diagnóstico haces de la situación de San Esteban del Valle?
Seguimos siendo un pueblo muy vital que ahora mismo está en la línea de pelear por mantenernos. Y de cara al futuro, hay que apostar por el turismo y apoyar muchísimo el emprendimiento de la gente joven. Vivir en San Esteban es un lujo, pero de nuestra parte tiene que haber servicios... transporte, educación y todo eso tiene que ser de calidad para que la gente entienda que sí está muy bien respirar aire puro, pero hay que vivir.
¿Qué supondrá para San Esteban la DOP Aceite del Valle del Tiétar?
Yo creo que es muy importante. La labor que ha hecho la cooperativa de San Esteban, abanderando junto con otras cooperativas y la Diputación ese proyecto, es magnífica y es una oportunidad. Creo que todas esas cosas son las que la gente joven que quiere quedarse en San Esteban, tiene que aprovechar, preparándose, porque esa DOP puede traer luego la transformación del producto en otras cosas.
¿Qué mensaje quiere lanzar a sus vecinos?
El mensaje fundamental es de agradecimiento absoluto por el apoyo durante estos años de gobierno municipal y mi felicitación a ellos por ser un pueblo valiente y sobre todo participativo y colaborador. Mi mensaje es que sigamos con esa unión entre el pueblo para seguir adelante, porque si San Esteban sigue peleando unido con quien esté en el ayuntamiento.