Una imagen vale más que mil palabras. Los jóvenes azulgranas acaparan el protagonismo. El Barcelona salvó con buen pie su primer partido liguero celebrado en Mestalla a las órdenes de Hansi Flick con un doblete de Lewandowski.
Futbolistas noveles dispuestos a derribar puertas y que sirven para comprender el valor de La Masia, donde siempre recurre el Barcelona, pero más cuando le acosan los números rojos y tiene que buscar entre los enormes talentos que tiene.
Frente al Valencia, el mundo del fútbol lo comprobó una vez más, con tres debuts (Marc Bernal, Pau Víctor y Gerard Martín), en un equipo en el que también jugaron Lamine Yamal, Pau Cubarsí, Alejandro Balde y Marc Casadó.
Nunca se sabrá si Flick lo hizo por convicción o por necesidad -la cantidad de bajas del equipo como De Jong, Araujo, Gavi, Gündogan, Fermín, Dani Olmo-, pero eso poco importa. Le dio la batuta en el mediocentro a un chaval de 17 años: Marc Bernal, que a los culés les recordará al Sergio Busquets que debutó con Pep Guardiola cuando tenía 20 años.
Bernal es un poco más alto (1,91 por 1,89) y más joven (17-20), pero no se amilanó. De los otros dos estrenos, el de Pau Víctor era esperado -fue el máximo goleador del filial el curso pasado y el Barça lo fichó del Girona- y el de Gerard Martín, sorprendente. Pau Víctor (22) ha sido el máximo goleador de la pretemporada y Gerard Martín (22), un portento físico que sustituyó a Balde y se hizo con la banda izquierda de Mestalla como si toda la vida hubiera jugado en Primera.
Aunque Pau Cubarsí y Lamine Yamal parezcan ilustres veteranos, ambos tienen 17 años. El central debutó hace siete meses y el delantero se ha encumbrado, con el Barça y la selección, pese a que se estrenó en el 23 con el primer equipo.
Alejando Balde (20 años) aún es más veterano que ellos y volvió a demostrar su clase hasta que sufrió un problema físico en la segunda parte, aunque todo quedó en un susto y Marc Casadó, uno de los cuatro que decidieron jugar al futbolín nada más aterrizar en El Prat a eso de las 3,00 de la madrugada de ayer, equilibró el mediocampo con un trabajo incansable y hasta tuvo dos ocasiones para marcar, lo que hubiera supuesto la guinda al pastel.
Y luego salió Eric García, que tiene 23 años, y parece que sea de otra generación; y Héctor Fort (18) esperaba en el banquillo. Fermín López (20), el héroe del oro en París, lo veía desde casa, como Gavi (20), que sigue recuperándose de su larga lesión y no se le espera hasta octubre.
También está a la espera Ansu Fati (21), que después de un estreno fulgurante, las lesiones no le dejan brillar... Y esa es La Masia, una reunión de talentos donde se criaron Messi, Puyol, Iniesta, Busquets, Xavi, Piqué, Cesc.