Así se crea cantera. Y con ello se consigue que los más pequeños de la casa se unan a esta apasionante ciencia que es la Astronomía y la observación de las estrellas.
Era algo que desde el Grupo de Observadores Astronómicos de Ávila perseguían desde hace tiempo, pero la pandemia trastocó en un primer momento estos planes. Ahora ha llegado la ocasión y ayer precisamente se pretendieron dar los pasos definitivos. Fueron muchos los niños que se dieron cita con sus padres para asistir a la presentación de este grupo y para inscribirse en el mismo, si así lo deseaban.
José Raúl Muñoz, presidente del GOAA se encargó de presentar el nuevo grupo y de explicar a los asistentes los objetivos que perseguían. El mismo presidente reconocía ante este periódico que esta era una iniciativa que perseguían desde hace tiempo, puesto que mucha gente les había propuesto la formación de un grupo infantil.
Reconoció que desde el grupo se pueden realizar muchas actividades, como talleres, que «hay un montón que se pueden organizar», señalaba, mientras corroboraba esta afirmación poniendo ejemplos como es el aprender a utilizar unos prismáticos que, según dijo, hay que comenzar a utilizar antes que un telescopio. O aprender a manejar el planisferio para orientarse por la noche sin tener un teléfono móvil, pues se puede hacer con papel y lápiz, a la vieja usanza. Habló también de otra actividad entretenida para los niños como son los talleres de lanzamiento de cohete con agua «Metes presión con una bomba de bicicleta y el cohete con agua sale volando hacia arriba, demostrando de esta forma como funciona un cohete». Y recalcó que se pueden hacer un montón de talleres formativos para los más pequeños.
Ayer, además de la presentación de este grupo, que se llevó a cabo en el Aula Medioambiental de San Nicolás, los pequeños también pudieron disfrutar de un tellarium Sistema solar a escala y de un planeteario hinchable.
También había prevista una observación de Júpiter y Saturno, si el clima lo hubiera permitido. Pero el cielo estrellado no pudieron presumiblemente observarlo observarlo porque las previsiones de cielo encapotado llegaban hasta altas horas de la noche, por lo que esta observación se pospuso para otro momento.