Cada abulense acude al médico ocho veces al año, la cifra más alta de todas las zonas de salud de Castilla y León, donde hay una media de 6,5 visitas. De esta forma, los abulenses son quienes más utilizan este recurso sanitario, ya sea con visitas a la consulta, domicilio o por teléfono. Se trata de una cifra parecida a la del año anterior, incluso levemente más baja, aunque cuando se trata de la presión asistencial hay alguna diferencia.

La presión asistencial es el indicador que mide el número total de pacientes atendidos por el profesional sanitario al día y durante el pasado año se situó en 29 pacientes diarios para los médicos abulenses, con una caída de casi dos puntos respecto al año anterior, cuando estaba rozando los 31. Es una mejora, por tanto, ya que los médicos tuvieron que ver menos pacientes al día pero hay que tener en cuenta que el pasado año se hizo un cambio en la metodología por lo que sólo se tienen en cuenta las citas de las agendas ordinarias y no las de procedimientos lo que ya de por sí genera una disminución.

Aún así, Ávila sigue un poco por encima de la media de Castilla yLeón que está en 28,5 pacientes diarios. Evidentemente, al tratarse de una media hay diferencias entre las distintas zonas de salud de la región y es en El Bierzo y Valladolid Oeste donde más consultas diarias hacen los médicos, superando las 34. El lado contrario está en Zamora, con poco más de 22. Es decir, un médico zamorano ve siete pacientes diarios menos que los abulenses.

En la presión también hay que tener en cuenta las diferencias entre el ámbito urbano y el rural. En la provincia de Ávila los médicos del ámbito urbano tienen más presión y a sus consultas acuden 37 pacientes al día (35 de media en Castilla y León) mientras que en el ámbito rural, que ya de por sí tiene otras dificultades, la media es de 25 pacientes. Curiosamente, se acude más al médico en al ámbito rural, con casi 9,5 visitas al año, mientras que en el urbano no se llega ni a siete.

Cuando se trata de enfermería, los abulenses acuden una media de cuatro veces al año a consulta de este profesional, que tiene una presión media de 15,6 pacientes al día. También en esta especialidad la frecuencia a la que se acude en Ávila es la más alta de Castilla y León.

consultas. Durante el pasado año el número de visitas en consultas, atención domiciliara y urgencias de Atención Primaria volvió a superar los dos millones en Ávila, pero con un descenso de un 2,6 por ciento respecto al año anterior. En concreto, el balance de actividad asistencial presentado por Sanidad indica que se llevaron a cabo 2.075.554 consultas en 2023, 55.806 menos que en 2022.

En sus diferentes tipos también se ve un descenso generalizado, menos en la atención domiciliaria y en enfermería. De esta forma, en las consultas, los médicos de familia superaron el millón de visitas, también con bajada respecto al año anterior, lo que contrasta con  lo que sucedió con las consultas de enfermería, donde hubo un ligero repunte hasta superar las 605.000. A esto hay que unir las 98.442 atenciones de los pediatras, que también bajan, y las más de 49.000 de otros profesionales.

Esto en cuanto a las consultas hechas en los centros de salud, pero cuando se trata de atención domiciliaria la situación es diferente y ahí los datos suben hasta llegar a 12.414 visitas de los médicos de familia y más de 47.000 cuando se trata de las enfermeras, en este caso con más de 2.500 visitas de subida. Son mínimos los casos en las que las visitas a los domicilios se hacen por los pediatras, solo en cinco ocasiones durante el pasado año.

A este trabajo hay que unir el de las urgencias en Atención Primaria (no se incluyen las de los hospitales) que dejaron una cifra de 192.256 atenciones durante el pasado año, unas 2.000 menos que las que se habían registrado por Sanidad en 2022.