Otros tres más al casillero, 'cuatro' si hubiera que darle un valor al golaverage particular ante un UPLangreo que recibía al Real Ávila en el Nuevo Ganzabal como rival directo –era quinto a tres puntos de distancia– y que acabó la jornada noveno a seis.Era mucho lo que había en juego este fin de semana, una realidad que empezará a ser habitual en las próximas semanas.Porque en esta segunda vuelta, especialmente en estos primeros partidos, los objetivos de todos, los que quieren pelear por estar arriba y los que quieren evitar estar abajo, están muy vivos. De ahí que todos los partidos tengan un premio añadido más allá de los tres puntos en juego. Ocurrirá de nuevo el próximo fin de semana, cuando el Marino de Luanco, séptimo clasificado, acuda al Adolfo Suárez con ánimo de 'vengar' la derrota que sufrió ante los encarnados en el Municipal de Miramar y, de paso, meterse en esa zona de playoffs aún demasiado cerca de todos pero que empieza a estar un poquito más lejos para algunos. Se abren distancias, aún pequeña pero ya evidentes.Cinco puntos son los que maneja de margen el Real Ávila, tercero, respecto al Real Valladolid Promesas y el propio Marino de Luanco, sexto y séptimo respectivamente. Esto va de sumar poco a poco.
Lo sabe un Real Ávila que volvió a vivir al límite en el Nuevo Ganzabal. «En esta categoría no es fácil ganar de más de un gol. Da igual que juegues con los de arriba o con los de abajo, zona media no existe y estamos todos muy igualados» ponía en valor Miguel de la Fuente tras un 0-1 muy trabajado y en el que los encarnados sobrevivieron por oficio y también, todo hay que decirlo, una pizca de suerte. Dos balones rechazados por el larguero, uno por fuego amigo –intento de despeje de Carlos Pascual– y otro de Vanderson, no ocurre todos los días. No lo ponía en duda Miguel de la Fuente acabado el partido. «Hemos necesitado esa pizca de suerte para ganar el partido». Ha dado la vuelta a la situación el equipo encarnado en este inicio de año. «Si a finales de 2024 teníamos mejores sensaciones que resultados, ahora probablemente estamos teniendo mejores resultados que sensaciones de juego».Ha pasado ante elUPLangreo y pasó ante el RCDeportivo Fabril, que pese a los méritos realizados en su primera mitad en el Adolfo Suárez se fueron de vacío.
Sin embargo la suerte hay que 'buscarla'. No fue suerte el tanto de Mario Rivas en una de las pocas ocasiones de los encarnados en el partido.La buscó el delantero encarnado cuando peleó el balón en el área pequeña ante la defensa asturiana. No fue sólo suerte que no llegara el tanto del UPLangreo ante sus envestidas. Lo evitaron los encarnados desde una capacidad para sobrevivir que empieza a ser marca de la casa.