Un año después de que falleciese el pintor abulense Javier Paradinas, un artista plástico cuya obra se define por la calidad, la originalidad y la variedad, Fundación Ávila inauguró este viernes, precisamente en el día que era su cumpleaños, una exposición que sirve para recordar y celebrar la trayectoria de este creador que, a pesar del notable reconocimiento que tuvo por su trabajo, siempre fue reacio a exhibir su obra.

Es en el Palacio los Serrano, curiosamente el espacio cultural en el que celebró su última exposición allá por el mes de julio de 2020 –para encontrar la anterior había que remontarse al año 1992, en la ciudad de San Sebastián–, donde puede disfrutarse esta exposición 'in memoriam', que reúne con afán de esencialidad antes que de exhaustividad más de 50 obras en un conjunto en el que caben pinturas, apuntes, tablas, carteles originales, fotografías, reproducciones de carteles y material de trabajo.

Paradinas, que gustaba mucho de salir al campo para vivir con todos los sentidos lo que luego iba a pintar, supo retratar con mirada nueva los viejos paisajes de Ávila, renovando así con su estilo lo que año a año se renueva con la vida.

cariño y emoción. Dolores Ruiz-Ayúcar, presidenta de Fundación Ávila, manifestó que esta exposición, «preciosa, está para nosotros cargada de cariño, de recuerdos y de muchísima emoción», todo ello en memoria de «un pintor maravilloso que pintó Ávila, capital y provincia, con un cariño enorme».

Miguel Ángel Espí, comisario de la exposición, resumió que esta muestra «en homenaje a Javier Paradinas es un tanto heterógena en cuanto a temas, tipos de cuadros, estilos..., porque lo que quiero es ahondar un poco en lo que era su personalidad». 

Con ese objetivo de abarcar mucho siendo muy selectivos en lo mostrado, añadió Espí, «hemos puesto una primera parte de fotografías de su ambiente de trabajo, de los paisajes que le gustaban y una vitrina con cuadernos de campo y de apuntes y de acuarelas». Otra sección la protagonizan «los paisajes más conocidos de él, su contacto con esa naturaleza que le gustaba tanto, sobre todo la primavera y el tema de las floraciones»; una tercera ha sido dedicada a las décadas de los 80-80 en las que «hace una incursión en la abstracción, pero donde lejos de una intención semántica lo que él quiere es experimentar con técnicas, texturas y calidades». 

La cuarta parte de la exposición se centra en su labor de cartelista para la UNED, en la que pueden verse originales y carteles ya impresos, en todo lo cual se puede observar «su capacidad de síntesis a la hora de abordar, sobre todo, el tema de los cursos de verano».

Paula Paradinas, hija de Javier, manifestó que «estamos muy orgullosas de que Miguel Ángel le haya realizado este homenaje a mi padre», una exposición que se inaugura «en un día muy emotivo porque sería su cumpleaños».

Aparte de la lógica emoción por el homenaje a su padre y por la fecha elegida para su inauguración, añadió que «agradecemos que se pueda volver a ver su pintura y su arte, y esperamos que lo disfrute todo el mundo que venga a verlo».

La exposición podrá visitarse hasta el día 6 de abril, de lunes a viernes de 11,00 a 14,00 y de 18,00 a 21,00 horas, y los sábados de 11,00 a 13,30 y de 18,00 a 20,00 horas.