La Guardia Civil investigó a los progenitores de un menor de dos años de edad, como presuntos autores de los delitos de Lesiones por Imprudencia y Abandono de Familia, Menores o Personas con Discapacidad necesitadas de especial protección tras tener que hospitalizar al niño por una intoxicación aguda de cannabis. Los padres fueron puestos a disposición judicial para saber cómo el menor tuvo acceso a la sustancia tóxica que le llevó a Cuidados Intensivos y si fue o no una ingesta accidental.
Recientemente la Guardia Civil tuvo conocimiento, a través de la Policía Nacional de Salamanca, del ingreso de un menor de dos años en el hospital de Nuestra Señora de Sonsoles de Ávila, por intoxicación. Por ello se iniciaron una serie de investigaciones policiales para analizar las circunstancias del hecho.
Lo que había sucedido es que unos días antes los progenitores del menor, con domicilio en la comarca de Pinares, tuvieron que trasladarle al hospital de Ávila, para que recibiera atención médica, debido a que presentaba comportamientos inusuales e inestables
Realizadas las correspondientes pruebas por personal facultativo médico, determinaron el traslado del menor a la Unidad de Cuidados Intensivos Pediátrica del Hospital de Salamanca, ya que el resultado de los análisis clínicos dio positivo en cannabis y presentaba una intoxicación aguda.
Afortunadamente, el menor se recuperó y al día siguiente recibió el alta, asumiendo su tutela provisional la Gerencia Territorial de Servicios Sociales de la Junta de Castilla y León, a la espera del esclarecimiento de los hechos. Según explican desde la Guardia Civil, ante sospechas fundadas de un control negligente del menor por parte de sus padres, al haber ingerido una sustancia tóxica a la que tuvo acceso sin impedimento, que le provocó una intoxicación aguda por cannabis y, teniendo que ser tratado en la UCI, la Guardia Civil les imputó por delitos de Lesiones por Imprudencia y Abandono de Familia Menores o Personas con Discapacidad, poniéndoles a disposición judicial como investigados. Se continúa con las investigaciones, para descubrir cómo el menor tuvo acceso a esa sustancia y si se trató de un consumo accidental o no.
Esta actuación fue desarrollada por el Equipo Mujer Menor, perteneciente a la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Ávila, con la colaboración del Cuerpo Nacional de Policía de Salamanca, la Gerencia Territorial de los Servicios Sociales de la Junta de Castilla y León, junto con los hospitales de Salamanca y Ávila.