Es una de las últimas direcciones hosteleras que ha abierto las puertas en la capital abulense pero está llamada a convertirse en uno de los locales de moda de la ciudad. No solo por su ubicación, en la avenida de Portugal y muy cerca del centro urbano, sino porque su nombre es toda una declaración de intenciones y una clara invocación al éxito. No en vano este bar restaurante tiene por nombre  Tyché, que  es  la diosa griega que personifica el destino y la fortuna y que regía la suerte o la prosperidad de una comunidad.

José Luis Gil Ortíguez está al frente de este nuevo bar restaurante que ha puesto en marcha en un local de su propiedad que en los últimos años ha acogido actividad hostelera. De hecho, cuenta este empresario, Tyché está concebido como él bar que a él le gustaría frecuentar. Un lugar con un diseño atractivo, espacioso, tranquilo y con una carta variada y amplia donde la comida se cuida y se trata con delicadeza. Y es que ya sea en barra; con tapas o bocatines, en mesa, donde se pueden consumir raciones y medias raciones; o en el restaurante, donde comer o cenar a la carta, en Tyché lo que se busca es que el cliente «coma bien y a buen precio». 

«Precios competitivos y raciones generosas». Ésa es la base de la cocina de Tyché, un local que su propietario ha diseñado con el objetivo de que «los clientes se sientan como en casa». 

Cafetería, bar y restaurante. Tyché, que abrió sus puertas días antes de Semana Santa, está concebido como un local abierto durante todo el día a abulenses y gente de paso que desde primera hora de la mañana pueden pasar por aquí para desayunar, tapear a mediodía, reponer fuerzas a la hora de la comida, tomar café por la tarde y cenar de tapas, raciones o a la carta. También cuenta este local con una terraza que seguramente ahora que, se supone, empieza el buen tiempo será un lugar muy frecuentado. 

Callos, cazón, boquerones en tempura, viandas ibéricas, pulpo o gambas son solo algunas de las raciones o medias raciones que ofrecen en este nuevo local en cuya barra, y en forma de tapa, se pueden degustar a diario más de una docena de propuestas, entre las que destacan los callos, la oreja, carne guisada, bocatines variados o la tortilla de patata. «Todo casero», puntualiza José Luis Gil al hablar de la importancia que aquí se le da a la cocina. 

En el apartado de restaurante, además de chuletón,  también ofrece este local la posibilidad de degustar asados tanto de cordero como de cochinillo o cabrito. Es más, Tyché cuenta con menú del día, de fin de semana y también especial, a base en este último caso de chuletón de un kilo con judías blancas o patatas revolconas para dos por 45 euros. 

«La acogida ha sido muy buena», asegura el propietario de este negocio que cuenta con la protección de la diosa de la fortuna.