Con un paseo por el entorno de Navalmoral de la Sierra arrancará este sábado, día 14 de octubre, la propuesta Rutas Forestales Guiadas, una iniciativa que nace con ánimo de continuidad y que en la siguiente cita, programada para finales de la próxima primavera, ahondará en la etnobotánica serrana. Se trata de rutas para todos los públicos que permiten acercar el conocimiento acumulado por las comunidades rurales durante siglos ayudando a una nueva lectura del paisaje serrano.

La primera de estas rutas, la de este sábado en Navalmoral de la Sierra, dará comienzo a las 10,00 horas, y estará dedicada a la Piedras Sacras.

La iniciativa, que está auspiciada por el Ayuntamiento de este municipio, contará con el acompañamiento de David Fernández del Peso, agente medioambiental de la localidad, y de Carlos del Peso, ingeniero de montes y profesor de la Universidad de Valladolid, ambos buenos conocedores del territorio.

El objetivo último de estas rutas, explican sus organizadores, «es fomentar el conocimiento del paisaje serrano abulense más cercano». La ruta, circular, de un recorrido de 10 kilómetros y con un desnivel de unos 200 metros recorrerá el sur de este término municipal en pleno corazón del Valle del Alberche. 

Los participantes se adentrarán en un paisaje marcado por el abandono agrícola a partir del éxodo rural de los años 60 del siglo pasado en la que serán testigos de cómo «las dificultades de mecanización de unos terrenos excesivamente pobres y pedregosos han producido una regeneración natural de la cubierta arbórea representada principalmente por encinares y enebrales singulares de Juniperus oxycedrus, favorecidos por el continuo pastoreo, mantenido en el tiempo hasta nuestros días, especialmente de cabra y oveja».

La ruta atraviesa además, como explican desde la organización, «interesantes ejemplos de prados de siega con fresnos trasmochos que secularmente han mantenido una importante cabaña ganadera vacuna, especialmente en inviernos, aprovechando el fondo de valle con temperaturas más suaves que la sierra, donde se subía el ganado a pasar el buen tiempo».

reminiscencias vetonas. De la misma manera destacan en la ruta las piedras sacras, «rocas singulares con connotaciones sagradas para las primitivas comunidades animistas, especialmente relacionadas con la cultura vetona». Este tipo de elementos del paisaje han pervivido hasta nuestros días vinculados a leyendas, juegos infantiles o a la propia toponimia. Es más, Navalmoral cuenta en su término «con interesantes ejemplos de campanarios rurales, lanchas propiciatorias de fecundidad, cantos de responsos o piedras resignificadas. Algunas de ellas, como el Canto de las Cien Cruces, serán objeto de visita en la propia ruta».

La ruta ofrece la oportunidad de  «conocer, de primera mano, la conformación geológica del paisaje, las agrupaciones vegetales más singulares o los usos tradicionales del territorio a lo largo de los distintos siglos de presencia del hombre en estas tierras serranas».