Pueblos del Tiétar alzan la voz por los problemas de cobertura

E.C.B
-

Tras las dos últimas interrupciones de la red de telefonía y fibra en apenas diez días, varios ayuntamiento de la zona exigen que se garantice la conectividad de una forma estable, dados los perjuicios ocasionados a la población y a empresas

El Arenal es uno de los municipios afectados. - Foto: Fernando Chinarro Fuentes

El Valle del Tiétar sufrió este domingo, por segunda vez en menos de diez días, una interrupción de la red de telefonía y fibra óptica que afectó nuevamente a sus vecinos y negocios. Una situación que ha llevado a varios municipios de la zona a alzar la voz para exigir a las empresas de telecomunicaciones que operan en esta comarca que garanticen la conectividad.

El pasado 18 de octubre, el Ayuntamiento de Candeleda, a través de su alcalde, Carlos Montesino, comunicaba que Telefónica había detectado una avería que afectó a los servicios de telefonía e internet en varias localidades del Bajo Tiétar entre los días 16 y 19. Y este domingo volvía a denunciar la falta de cobertura, al tiempo que exigía una solución y apuntaba la intención de unirse en la Mancomunidad del Bajo Tiétar para hacer que «esta petición sea escuchada y que se atienda esta necesidad esencial en nuestra comarca». En ese sentido, hay convocada este jueves una asamblea extraordinaria de la mancomunidad para realizar un comunicado oficial conjunto de los 11 municipios que la integran reclamando «una conectividad segura para todos los usuarios».

El regidor candeledano explicó a los vecinos que «para que nos bonifiquen o ajusten nuestras facturas por la falta de servicios desde el 16 al 19 de octubre y desde este domingo hasta que se resuelva, es necesario abrir incidencias individuales con nuestras operadoras, ya que solo con un volumen alto de reportes, las compañías consideran la afectación como masiva y aplican descuentos o compensaciones automáticamente». Por ello pidió a la ciudadanía que en cada caso «contacte al soporte técnico de su operador y documente la incidencia para escalar el problema y que nos den una solución y compensación justa».

Otro Ayuntamiento que también alzó la voz este fin de semana fue el de El Arenal, para «instar a las empresas de telecomunicaciones, en especial a Movistar, a implementar los medios necesarios para evitar esta situación, que supone un perjuicio significativo para empresas, entidades públicas, personas que teletrabajan, y vecinos en general. Este problema impacta de manera especial a las personas mayores cuyos familiares se encuentran fuera de la localidad y dependen de la conectividad para mantenerse en contacto».

Desde el consistorio subrayaron que «los vecinos de las zonas rurales tienen los mismos derechos de acceso a servicios básicos que aquellos que residen en áreas urbanas. La falta de conectividad en áreas rurales, como el Valle del Tiétar, es una situación crítica que se presenta cada vez con más frecuencia, afectando no solo a El Arenal, sino a muchos otros pueblos de la zona».

Según indican estos municipios afectados por los problemas de conectividad, «las averías pueden tardar hasta 36 horas en solucionarse, tiempo que paraliza la vida cotidiana y agrava la falta de oportunidades en el medio rural».

Desde el Ayuntamiento de El Arenal remarcaron que «este problema se enmarca en una problemática más amplia, la despoblación rural, pues en muchas áreas rurales de España, la falta de acceso a servicios de telecomunicaciones -como la cobertura móvil y la fibra óptica- es uno de los factores que desalientan a nuevos habitantes y empujan a los vecinos a buscar mejores condiciones en las ciudades. Sin acceso a una infraestructura básica de conectividad, la vida y el desarrollo económico en estos pueblos se ven seriamente afectados, y la tendencia hacia la despoblación se agrava».

Por todo ello, este Ayuntamiento hizo un «llamado urgente» a las empresas de telecomunicaciones para que» ofrezcan soluciones estables y sostenibles, respetando el derecho de los habitantes del Valle del Tiétar a una conexión de calidad que permita una vida digna en el medio rural y promueva la igualdad de oportunidades entre el campo y la ciudad».