244 alumnos de cuarto de ESO de 17 institutos abulenses, repartidos en 61 equipos de cuatro integrantes cada uno, participan este año, en la que es la primera presencia de estudiantes de nuestra provincia en una iniciativa formativa de ámbito nacional que llega este curso a su sexta edición, en la Ciberliga de la Guardia Civil, un encuentro competitivo sobre ciberseguridad cuyo fin es formar para prevenir que ayer fue presentado en el instituto Isabel de Castilla.

El delegado territorial de la Junta, José Francisco Hernández; el subdelegado del Gobierno, Fernando Galeano; el teniente coronel jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Ávila, Gustavo Dorda, la directora provincial de Educación, Laura Martín, y la directora del IES Isabel de Castilla, Aida Márquez, presentaron esta iniciativa que se estrena en Ávila, agradeciendo el primero a la Guardia Civil «el esfuerzo que está haciendo para garantizar la libertad de los ciudadanos, en ese caso la de los más jóvenes».

El objetivo de esta Ciberliga, resumió el delegado, es «formar en los jóvenes en el ámbito de las nuevas tecnologías», un campo en el que «se abren unas posibilidades enormes» pero que «tiene también sus riesgos». En esta iniciativa «lo más importante es la formación previa que realizan los jóvenes de la mano de la Guardia Civil para conocer todos los riesgos inherentes a las redes sociales», con el fin de que puedan manejarse en ellas «con absoluta seguridad, para que esas destrezas que adquieren de la mano de los efectivos de la Guardia Civil las lleven de por vida».

Aunque es una cita competitiva, comentó que «lo más importante es la adquisición de esos conocimientos que van a tener de por vida y que son la mejor correa de transmisión, porque nuestros jóvenes también tienen un elemento formativo complementario con sus padres, con sus familiares, con los amigos...».

Fernando Galeano agradeció a la Guardia Civil «el enorme trabajo que supone poner en marcha esta iniciativa», de la que explicó que desde su puesta en marcha son ya nueve las comunidades autónomas que se han adherido desde que echó a andar en 2019 con solamente tres.

Aseguró que «para el Gobierno de España es fundamental poder colaborar en la educación de nuestros alumnos y que dentro de los centros educativos se vayan introduciendo cada vez más elementos transversales», y esta Ciberliga «nos permite formarles como ciudadanos en el mundo digital». Señaló asimismo la importancia de que «esta iniciativa no tenga sólo carácter competitivo sino fundamentalmente divulgativo», en el sentido de mostrar a los jóvenes que «aunque sean usuarios nativos de las nuevas tecnologías es muy importante que den un paso más allá en elementos de seguridad, y que igual que se forman en otras áreas lo hagan también en la seguridad, que adquieran herramientas para defenderse y protegerse, ser más fuertes ante las adversidades que van a encontrar en el mundo exterior y en el mundo digital en concreto», algo muy importante en una sociedad en la que «un cuarto de la delincuencia es ciberdelito».

Gustavo Dorda recordó que este proyecto «arrancó en el año 2019, inicialmente para profesionales», y que luego se amplió «al mundo de la educación, porque las ciberamenazas no tienen ni edad, ni fronteras, ni demarcaciones». Cuando a la Guardia Civil «le plantearon sumar a todas las provincias de Castilla y León al proyecto todas las comandancias y provincias dijimos que sí  porque es muy bonito que nuestros chicos y chicas, que hay veces que saben más de nuevas tecnologías incluso que nosotros mismos, compartan con nosotros sus experiencias y que nosotros les podamos enseñar los riesgos que esas experiencias pueden conllevar».

El proyecto, siguió explicando, «es importantísimo para nosotros, no sólo porque ayuda a que nos conozcan como institución sino porque ayuda a los jóvenes a que conozcan los riesgos que supone la ciberdelincuencia, y porque nosotros también podemos aprender de ellos».

En esencia, lo que hace la Guardia Civil con esos alumnos es plantearles «unos pequeños supuestos prácticos a través de los cuales tienen que filtrar mensajes ofensivos, fotos y vídeos manipulados», y a partir de esos materiales que pueden considerarse peligrosos «van a tener que hacer en esa etapa una pequeña investigación parecida a la que hacemos nosotros».

Laura Martín manifestó que «nuestros jóvenes han nacido en una sociedad en la que la tecnología es parte de sus vidas, y nosotros tenemos que asegurarnos de que son capaces de gestionar las amenazas que puedan existir, que son capaces de detectarlas y de solventarlas, de protegerse de ellas, y al mismo tiempo de aprovechar los beneficios que tiene la tecnología».

Además de «ser interesante, esta propuesta de la Guardia Civil es sobre todo necesaria, porque hemos detectado que hay muchas veces imágenes manipuladas, retos habituales entre los adolescentes, y creemos que una formación de este tipo es necesaria", tanto que "nos gustaría que más que opcional fuera algo obligatorio en todos los centros, más que transversal, que estuviera incluido dentro del currículo».