Llegó la primera victoria de la temporada fuera de casa para el Real Ávila. Y lo hizo en un buen momento.Lo necesitaba el equipo, tocado en el orgullo tras dos semanas contradictorias. En Almazán se pudo ganar, pero dos penaltis al limbo terminaron por llevar a los encarnados a encajar su primera derrota (1-0) de la temporada. «La derrota del otro día escuece y mucho» decía entonces Borja Rubiato. Se quiso reconducir el ánimo ante el Santa Marta pero la tarde no salió como se esperaba. No sólo fueron los dos puntos perdidos (1-1) sino la imagen ofrecida, lejos de lo que se espera y se esperaba. «La gente está dolida» confesaba el técnico tras el tropiezo. Antecedentes delicados para un último desplazamiento antes del parón, un descanso obligado por una eliminatoria de Copa del Rey colocada a calzador en fin de semana en el que el Almazán podrá soñar en grande. Y mientras unos sueñan, otros podrán descansar aliviados.Porque en el Área de Puente Castro el equipo encarnado conseguía la victoria, la primera de la temporada fuera de casa. Uno de esos triunfos reconfortantes por el cuándo y el cómo.
Importaba el cuándo. Haber llegado al parón con un resultado adverso habría colocado al equipo en una posición incómoda, no sólo en lo referente a la clasificación, donde la temporada empieza a requerir sumar de tres en tres con cierta asiduidad, sino en lo emocional. Tras los reveses ante el Almazán y Santa Marta, un tercero hubiera sino un tema espinoso. En una situación así, el equipo fue convincente.
Importaba el cómo. Era necesario ganar, pero también hacerlo con convicción. Y ante el Júpiter Leonesa B los encarnados firmaron un buen partido. Se dejó la portería a cero, Ñete abandonó el protagonismo 'principal' con el que destacó otras tardes y el equipo generó ocasiones –incluso un penalti fallado– como para haber logrado un mejor resultado. Quedó satisfecho el entrenador. «Era un partido importante» confesaba Borja Rubiato. Había que responder a lo ocurrido jornadas atrás. «El equipo ha dado un paso al frente. Es la línea que debemos tener» marca el técnico encarnado con una de esas victorias con las que dar carpetazo a todo lo anterior.