Desde la ciudad más alta de España que llegue «bien alto el mensaje», que los deportistas con síndrome de Down merecen su propia categoría deportiva en los Juegos Paralímpicos. Sobre el adoquinado y las rampas del lienzo norte de la Muralla, cargados de ganas y razones, José Javier Conde, leyenda del atletismo adaptado español, abanderó este domingo en la ciudad abulense una reivindicación muy especial, la que desde hace años promueven todos aquellos deportistas con síndrome de Down en busca de un reconocimiento específico de cara a los Juegos Paralímpicos a través de una categoría propia –en este caso la T21– que les permita hacerse visibles en la cita deportiva más importante. Es el reto #DownParis2024, la iniciativa a la que desde hace tiempo se quiso sumar José Javier Conde, cinco veces medalla de oro o veces medalla de plata en unos Juegos Paralímpicos y que desde hace tiempo decidió aportar su granito de arena a esta propuesta de una manera muy particular, ascendiendo a pie los puertos míticos de la Vuelta a España. «Habremos hecho más de veinte y esto es emocionante» decía a los pies de la cuesta adoquinada, allí donde el ciclismo español ha dibujado alguna de las más bellas estampas. «Es lo que hemos visto habitualmente en la Vuelta a España, vibrando con el ciclismo español. Poder venir a Ávila y dar a conocer este proyecto nos interesa muchísimo». Y la verdad es que si no fuera por iniciativas como ésta, sería una reivindicación 'desconocida' para muchos.
«La gente que participa en los Juegos Paralímpicos no son todos los que se lo merecen» explica José Javier Conde, que ha tomado parte en los Juegos Paralímpicos de Barcelona 1992, Atlanta 1996, Sidney 2000, Atenas 2004 o Pekín 2008.Sabe de lo que habla quien incluso ha sido abanderado del equipo español. «Hay deportistas que se van a tener que quedar en su casa sin ningún tipo de posibilidad de acudir y tenemos que poner las cosas en su sitio». Hace tiempo que todo el mundo ha asumido que los resultados de esta reivindicación no llegarán a tiempo para París 2024. «A ver si es posible que para los juegos de Los Ángeles 2028 se incremente la participación de los atletas con discapacidad intelectual e incluir la clase T21, que es la que corresponde a los deportistas con síndrome de Down». Y es que en los Juegos Paralímpicos no existe categoría destinada a deportistas con síndrome de Down. Lo curioso es que sí es una categoría reconocida en eventos mundiales como los Virtus Global Games, que se han convertido en el evento de referencia para que los atletas con discapacidad intelectual compitan en la elite multideportiva internacional al más alto nivel.Un evento donde la barcense Lucía Sánchez logró la medalla de oro en para karate.
Pese a ser los deportistas con discapacidad intelectual los que más licencias deportivas alcanzan, son los que menos relevancia tienen en unos Juegos Paralímpicos. «Actualmente vienen participando entre 60 y 100 en unos juegos en los que habrá unos 3.500 atletas. El porcentaje es ridículo» lamenta José Javier Conde, que recorre la geografía española de la mano de esta reivindicación. «Que desde la ciudad más alta de España llegue nuestra reivindicación. Cada vez somos más. Ya ha llegado al Congreso, al Senado, todos los partidos políticos están todos de acuerdo...Hay que hacer ruido de cara al Comité Paralímpico Internacional para que atienda esta reivindicación». Para hacer más ruido tuvo a su lado la mejor compañía, empezando por el joven atleta invidente Ánder Olaso y su guía César Palacios 'Chapi' y siguiendo por deportistas como César Galán, Longi Herráez, Jaime... Una 'grupeta' que se unió a José Javier Conde, que reconoció a Ánder como una «realidad» del atletismo adaptado. «Cada vez va mejorando».Y no dudó en situarlo como uno de los fijos para las futuras citas paralímpicas.