El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha anunciado este domingo que su país ha presentado una denuncia contra Rusia ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) para conseguir un dictamen que obligue al cese inmediato de la invasión rusa de su país.
"Ucrania ha presentado una denuncia contra Rusia ante la CIJ. Rusia debe rendir cuentas por manipular la noción de genocidio para justificar la agresión", ha declarado el presidente a través de Twitter.
"Solicitamos una decisión urgente que ordene a Rusia que cese la actividad militar ahora y esperamos que los procedimientos comiencen la próxima semana", ha añadido.
Horas antes, en un mensaje televisivo a la población, el mandatario ucraniano afirmó que "lo que hacen los invasores en Jarkov, Okhtyrka, Kiev, Odesa y otra ciudades y pueblos merece ser juzgado por un tribunal internacional".
La invasión rusa de Ucrania ha causado que 368.000 personas hayan huido de ese país, según los últimos datos de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
A ellos hay que sumar 160.000 desplazados internos, mientras que al menos 64 civiles han fallecido y unos 180 resultaron heridos, según las agencias humanitarias de Naciones Unidas.
Los principales flujos de refugiados se han registrado en países vecinos como Moldavia, Rumanía o Polonia, país este último donde las autoridades fronterizas han informado de la llegada de unos 100.000 ucranianos.
La corte con sede en La Haya es un mecanismo que tanto Rusia como Ucrania han empleado en los últimos años en torno al conflicto en la región del Donbás que enfrenta al Ejército ucraniano con los separatistas de Donetsk y Lugansk.
Hay que recordar que la CIJ es una corte internacional dedicada a dirimir disputas entre países conforme al Derecho Internacional pero no tiene ninguna forma de hacer cumplir sus fallos, algo que prácticamente queda a la voluntad de los estados.