Silvestre recuerda cómo jugaba con sus amigos a los bolos, Leoncio a las canicas o Victoria a la comba. Tres nombres y tres juegos que forman parte del recopilatorio 'Jugando entre recuerdos' elaborado por Senior Servicios Integrales, empresa gestora del Servicio de Ayuda a Domicilio de la Diputación de Ávila, que se encargó de preparar una revista con doce juegos tradicionales a los que jugaban las personas que atienden y que pueden llegar a las nuevas generaciones, para que vuelvan a salir a la calle y se alejen de las pantallas. Juegos de siempre para niños de ahora.
La revista será entregada a todos los usuarios de este servicio, que también colaboraron en su elaboración, y que según dijo el presidente de la Diputación, Carlos García, llega a más de 2.500 personas de 247 municipios, dando empleo a cerca de 600 auxiliares. Este servicio ayuda, recordó, a que las personas pueden mantenerse en el municipio en el que han nacido, contar con ayuda para tener autonomía y luchar «contra la soledad no deseada». Para ello, en 2025 la institución provincial destinará cerca de 10 millones para atender a estas personas que se pueden quedar en sus domicilios con ese apoyo extra a través de las auxiliares.
El trabajo que realizan es esencial y por eso también aparecen reflejadas en esta revista y en sus 25 páginas que repasan los juegos y la historia de los mayores, que ahora pueden compartir con los más pequeños. Los mayores transmiten su ilusión y sirve también para «recuperar tradiciones» y «alejar los móviles» de las nuevas generaciones.
La presentación oficial de la revista se llevó a cabo en las instalaciones de Naturávila donde Laura Cantero, la delegada social de Senior Servicios Integrales, explicó que esta segunda obra es una continuación del libro de recetas que ya se hizo en su día, ahora pensando en dirigirse a niños «menores de diez años» que se pueden acercar a «la sabiduría popular» que está plasmada en esta revista. Con ello se pretende conectar generaciones para que los niños vuelvan a las calles.
Es cierto que muchas de las formas de entretenerse de los mayores se han perdido con el tiempo, de ahí la importancia de este tipo de iniciativas. Para llevarlo a cabo se ha recurrido directamente a la fuente, a los mayores que han recordado sus juegos de niños y los pasatiempos populares que marcaron a su generación y que hoy se han convertido en valiosos recuerdos y parte de nuestra herencia.
De ahí la investigación llevada a cabo por la empresa, con esa recopilación de juegos pero también con la intención de destacar que las personas mayores son transmisoras de la sabiduría popular.
Y por eso están las historias de Silvestre, Leoncio o Victoria, pero también la de Ascensión, beneficiaria del servicio de 74 años, que cuenta que pasaba las tardes jugando a la rayuela con sus amigas, aunque en su pueblo se conocía como 'la muñeca'. También se ve la historia de un padre y un hijo de 91 y 65 años, 'los julián', con su juego de la rana, y Florentina y Antonio con la creatividad que trasforma objetos cotidianos en piezas de juego gracias a los alfileres.