Ávila acoge la LX Reunión de la Sociedad Castellano-Astur-Leonesa de Nefrología, un encuentro con más de 90 profesionales que abordan esta especialidad y lo hacen además respecto a importantes novedades con fármacos que son una auténtica «revolución».
El jefe del Servicio de Nefrología de Ávila y presidente del comité técnico, Jesús Martín, explicó que en Ávila hay 98 pacientes en hemodiálisis y 30 en diálisis peritoneal (la 'domiciliaria), situando a Ávila en la cabeza de las provincias que porcentualmente acude a esta segunda fórmula que da «mucha más libertad». Respecto a las patología, sigue siendo «la más frecuente» la diabetes mellitus, que «es la que nos va llenando las unidades», pero con la esperanza de que los «fármacos novedosos» puedan disminuir la prevalencia de la enfermedad renal crónica. En este momento la media en Ávila de los pacientes es de 75 años porque «los jóvenes entran menos, se cuidan más».
Respecto al congreso, destacó el récord de inscripción, con 93 asistentes, y la presentación de novedades, como es el caso este año de nuevos tratamientos en la prevención de la enfermedad renal crónica. Hay fármacos nuevos para la enfermedad renal y la cardíaca, explicó, «aprovechando que ya se utilizaban para la diabetes mellitus y que han supuesto una revolución que desde hace 20 años no conocíamos», con novedades que «ya se están convirtiendo en un tratamiento de rutina».
El congreso contó con la asistencia de Jesús García-Cruces, viceconsejero de Asistencia Sanitaria, que destacó la importancia de este tipo de encuentros en una especialidad que puede ser desconocida desde fuera pero en la que se está haciendo «un esfuerzo importante» para potenciarla en Castilla y León, donde hay una plantilla de 85 nefrólogos, seis de ellos en Ávila. Se está reforzando «el atractivo para los jóvenes», con ocho plazas acreditadas para formación de residentes año tras año y con la intención de tener una más para seguir formando a médicos en los hospitales de Castilla y León. Además habló de la importancia de la estabilización, donde se han sacado ocho plazas de nefrólogos para reforzar las plantillas, y fidelización, con médicos residentes que terminan una especialidad en Castilla y+ León o fuera de la comunidad y a quienes se ofrece «contratos muy interesantes» de tres años,.
Recordó que la enfermedad renal es «silenciosa» por lo que destaca la importancia de la detección precoz y la existencia en Castilla y León de un programa para la atención integral, que se está actualizando, así como el trabajo para que la diálisis sea «accesible», como se ve en Ávila con 20 pacientes del sur de la provincia que se «dializan en Talavera de la Reina».