Llega el 99 Aniversario del Real Ávila y lo hace con nuevos propietarios. Desde el pasado mes de abril el club descansa en manos de un grupo inversor de Madrid, que adquiría Gestfootball Elite, propietaria del 67 por ciento de las acciones del club. Con ellos, la Gestora Deportiva DS360 con Alberto Cases y Álvaro Gómez a la cabeza. Dos de los protagonistas de la actual gestión, junto a Rosa Sanz, en club que mira «a presente y futuro» bajo un nuevo proyecto deportivo, institucional y económico con unas líneas bien marcadas. Porque los nuevos propietarios no han llegado para irse 'mañana'. Nada es seguro, mucho menos en el mundo del fútbol, pero no es la idea. Están aquí para quedarse.
Desde entonces –llegaron con los playoffs a la vuelta de la esquina– han sido semanas «para analizar la estructura del club, sus infraestructuras y conocer la situación económica real». Un trabajo poco vistoso pero indispensable cuando se aterriza en un nuevo club. Y ellos, que gestionan el RayoMajadahonda de Primera RFEF y el Paracuellos de Tercera RFEF, saben de ello. Un aterrizaje con el que ponerse al día y diseñar esta nueva etapa en todos los sentidos, empezando por el deportivo.
En sus manos, su primer proyecto deportivo. Porque esta 2022-23 ya lleva su sello.Y lo hace bajo las ideas que quieren para su Real Ávila. Se ha mantenido «una base de jugadores de la pasada temporada que conocían la categoría y el club». Junto a ellos «un grupo de jugadores jóvenes con talento y proyección».Es el modelo que se persigue y el que va a mandar a partir de ahora. Porque tienen claro que «debemos trabajar el equipo desde abajo, desde la gente joven que se pueda desarrollar en el club». El club quiere y debe crecer junto a sus jugadores. Un modelo que tiene sus tiempos. «Tenemos claro que queremos un proyecto de equipo joven, con jugadores que crezcan desde abajo. Hay que hacer una buena base, trabajar poco a poco con una cantera que nos ayude a soportar el equipo».
Su experiencia en el Rayo Majadahonda la quieren implementar aquí. «Hay que conseguir que la cantera mejore las categorías en las que compite».Desde hace tiempo las inferiores del Real Ávila están lejos de lo que de verdad necesita el club. «Tenemos que mejorar las categorías en las que juegan nuestro equipos de cantera, porque será eso lo que hará que la gente joven quiera jugar en nuestro equipo. De lo contrario, perdemos talento. Los chicos se irán a equipos que ocupan categorías nacionales» reconoce como algo lógico en lo que puede ser una alusión a la situación del Zona Norte o Diocesanos en la Liga Nacional. «No es nuestro primer equipo lo que tiene que hacer que vengan jugadores a la cantera, sino que nuestros equipos base estén en las mejores categorías. Eso convertirá nuestra cantera en mucho más atractiva.Debemos desarrollar un proyecto de cantera de alto rendimiento en el que jugadores quieran venir a jugar aquí». Porque tienen muy claro que la cantera «debe ser la base» del club.
En este crecimiento, la proyección en la provincia. «Desde que llegamos lo tuvimos claro. Es una de las cosas que queremos heredar de la anterior gestión.Carlos González se preocupaba mucho de ello y lo hizo muy bien. Debemos tomar ese testigo». La idea, que el Real Ávila «sea un club de provincia, que la provincia se pueda ver reflejada en este club».De ahí, en buena parte, la pretemporada diseñada este verano. Tampoco faltarán en la provincia actos del Centenario.
Primera plantilla, cantera, infraestructuras –«había cosas en el estadio que no podían estar como estaban»– provincia... Y profesionalización del club. Una de las patas más importantes, aunque nada sencilla. «No es fácil, porque debemos administrar los recursos que tenemos sin hacer locuras. Sería muy fácil decir que se va a poner una cantidad de dinero pero al final eso es peligroso. Hacer las cosas a lo loco y a golpe de talonario es un peligro.Lo que hay que tratar de hacer es un club rentable por sí solo. En estos momentos el Real Ávila no lo es. Debemos trabajar en ello, con un proyecto a medio y largo plazo para que llegue un momento en el que se alcance el 'empate' económico y a partir de ahí pueda sostenerse económicamente».
Mucho trabajo realizado y mucho por hacer. Y en todo este contexto un Centenario por delante. «Es una responsabilidad. Son 100 años, sólo ocurre una vez en la vida y es un tema que hay que trabajar», porque tienen muy claro que es una oportunidad para el club pero también para la ciudad.