El Real Ávila, su afición y la ciudad sueñan con una noche mágica, de esas que tantas veces se han visto en la Copa del Rey, de esas que han protagonizado otros y que ahora se merecen protagonizar los encarnados.Ya la vivieron contra el Real Oviedo en una tanda de penaltis que quedará para siempre en el recuerdo.Pero lo de este martes será diferente.Porque delante hay un Primera División, un Real Valladolid que más allá del momento deportivo y anímico por el que atraviesa llega al Adolfo Suárez –19,00 horas– rodeado de una atmósfera en la que ha ido creciendo la sensación, el ánimo y el sentimiento de que es posible. «Desde la humildad de saber cuál es la lógica, hay esa sensación, sí que nos lo creemos.La Copa del Rey es una competición que ya nos ha demostrado que tiene esa magia. Nosotros jugamos en nuestro campo.El hecho de haber eliminado al Real Oviedo nos genera un punto de confianza, nos vemos capaces de competir» reconoce Miguel de la Fuente, entrenador del Real Ávila, ante uno de los partidos más especiales de los últimos años.
«Ganas» sería la palabra que mejor definiría al vestuario encarnado ante el duelo contra el Real Valladolid. «Ganas de vivir otro día histórico, de competir, de mostrar un buen nivel, de volvernos a encontrar con la gente de Ávila, con la afición».Lo acompañan con la responsabilidad «de lo que es un día importante para la historia de este club» que en sus 101 años de historia únicamente ha cruzado sus caminos con dos 'primeras' en Copa del Rey. Fue a inicios de los 90s ante el Real Oviedo y Elche.
Desde una premisa, la realidad de que «tenemos poco que perder y mucho que ganar», los encarnados saltarán al césped con la idea de «no renunciar a nada». Es la «ilusión» la que rodea al equipo, que quiere mostrar su «mejor versión» en un partido para enganchar aún más a una afición ya volcada con el equipo y en un Adolfo Suárez 'crecido' hasta los 5.000 localidades.
El cese de Pezzolano al frente del Real Valladolid y la elección de Álvaro Rubio, entrenador del Promesas, como 'interino' para el duelo de Copa del Rey ha alterado los planes previstos en el cuadro encarnado. «Es la mejor solución que podían tener ahora mismo para este partido. Es un muy buen entrenador» que conoce a la perfección al Real Ávila. «Por circunstancias de calendario el Promesas recibe siempre al rival que dejamos en liga, por lo que entiendo que nos ha visto bastantes veces» analiza De la Fuente sobre este cambio. «Nos ha cambiado el paso. Teníamos trabajados ciertos automatismos con el mister anterior» explicaba el técnico encarnado ante un hecho que rodea aún más de incógnitas al Real Valladolid que pise el césped del Adolfo Suárez. «Tiene muy buenos jugadores» eso no cambia quién lo entrene. Ahora mismo le rodea «cierta inestabilidad» que puede aprovechar el equipo encarnado. Inestabilidad que juega a favor del Real Ávila. «El hecho de que hayamos eliminado al Real Oviedo les pone en aviso de cómo compite este Real Ávila. Es verdad que tienen una situación que no es la mejor para afrontar un partido» como éste.«Estos equipos no van a ganar la Copa.Se tienen que centrar en lo que se tienen que centrar».Lo que piensa Miguel de la Fuente lo piensan todos los aficionados encarnados. «Eso no quiere decir que no vayan a venir aquí a hacerlo lo mejor posible» porque asume que el trascendental duelo que tienen ante Las Palmas se afronta de otra manera «habiendo pasado la eliminatoria». En este aspecto en la hoja de ruta de los encarnados está «llevar el partido a nuestro terreno, que puedan aparecer nervios, dudas... Queremos llevar el partido a esos términos».
Se ve capaz del Real Ávila de competir pero «para poder competir con un Real Valladolid de Primera División se tienen que dar muchas circunstancias.Que ellos no estén bien, que técnicamente no encuentren esa acción de calidad que rompa el partido, que nosotros estemos a un nivel de concentración muy alto. Se tiene que dar todo para que consigamos competir a un Primera División como el Real Valladolid pero esa circunstancia se dio el día del Real Oviedo y en ello es en lo que hemos trabajado», en repetirlo.
Quiere Miguel de la Fuente ver un Ávila «valiente, capaz de salir a competir, a disfrutar, a tener personalidad con balón. Debemos ser más inteligentes, correr no más sino mejor y tener concentración por si las cosas no van como quisiéramos» describe un entrenador que no da pistas sobre el posible once inicial. Ha venido el técnico realizando rotaciones en los pasados duelos ante RSGimnástica y Numancia pensando en este choque. Y todo desde un plan de partido más allá del once inicial. «Hay jugadores que están más preparados para un final con el equipo contrario cansado y con dudas y jugadores que deben partir desde un nivel físico muy alto para trabajar el partido desde el inicio. El equipo debe estar muy compensado desde el minuto 1 hasta el 90. Tenemos 16-17 jugadores disponibles para ser titulares».