Los trabajadores del campo siguen sin levantar cabeza. Justo cuando denunciaban que, como consecuencia de las altas temperaturas, estaban proliferando los topillos en las tierras de cultivo de La Moraña, una fuerte tormenta de pedrisco les sorprendió a última hora del lunes, dejando la cosecha de cereal arrasada. Uno de los agricultores afectados fue Ventura González, secretario general de UPA Ávila, quien vio como hasta el 80% de su cultivo quedó desolado. «Algunos municipios de la comarca, como Madrigal de las Altas Torres, Rasueros, Horcajo de las Torres o Blasconuño de Matacabras, se han visto afectados con un porcentaje de daños de hasta el 80%», aseguró.
Un nuevo contratiempo para los agricultores de la zona, que ven cómo la campaña sigue sin remontar. «Los números no estaban saliendo porque la cosecha real que estábamos teniendo no se acercaba a nuestras previsiones. Ahora, este nuevo varapalo nos ha dejado muy desolados», afirmó.
La tormenta sorprendió a todos, ya que no había predicciones de ello. Sin embargo, en apenas 20 minutos se recogieron 30 litros por metro cuadrado en Madrigal de las Altas Torres. Además, el fuerte viento y las trombas de agua dejó muy maltrechas plantaciones de productos de regadío, como la vid, la patata o la cebolla, donde los daños producidos se manifestarán más adelante.
Esto es el remate para los agricultores de La Moraña, que se sienten desanimados y desolados. «Esto se suma a que la producción no está acompañando y a la caída de los precios», expresó Ventura González como portavoz de todos los afectados.