La cuesta de enero se empina con subidas en impuestos y tasas

M.E
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Las ordenanzas, ya en vigor, recogen el alza del IBI, la ORA, el autobús, la recogida de basura y los precios públicos del ámbito social y deportivo

La cuesta de enero se empina con subidas en impuestos y tasas - Foto: Isabel García

El mes de enero suele ser uno de los momentos económicos más delicados del año para muchas familias debido al efecto de la 'cuesta de enero', un término que hace referencia a los gastos que coinciden en el primer mes de cada ejercicio anual derivado del importante desembolso que suelen traer consigo las fiestas de Navidad –cerca de 700 euros según la OCU– y la subida de precios en bienes, servicios, impuestos, tasas y precios públicos que se actualizan con el cambio de año. Este 2025 no es una excepción y a las subidas generalizadas en ámbitos como la cesta de la compra, los suministros o el transporte se suman los incrementos de precios en el ámbito municipal, en marco de la entrada en vigor de unas nuevas ordenanzas fiscales que para Ávila deparan subidas en impuestos, tasas y precios públicos que afectarán, de alguna u otra manera, a todos los vecinos. Todo ello después de un 2024 en el que las ordenanzas se mantuvieron congeladas al no llegarse a un acuerdo en el Mercado Chico.

El nuevo proyecto ya vigente se aprobó a finales de octubre de la mano de Por Ávila y con el sostén de VOX. Entonces la teniente de alcalde de Recursos Humanos y Hacienda del Ayuntamiento de Ávila, Ángela García, ya recordó que esta actualización de tasas y precios públicos era la «única herramienta» de la que se disponía para poder hacer frente al aumento de gastos en servicios, derivados tanto de la inflación como de la actualización de convenios de las empresas que prestan servicios al Consistorio; entre ellas, la entrada en vigor en el año completo del nuevo servicio de recogida de residuos y limpieza viaria, cuyo contrato supondrá 8 millones de euros anuales, o la actualización por ley de la tasa de basuras para que ésta cubra íntegramente el servicio.

Así, el documento que ya puede consultarse en la página web del Ayuntamiento recoge la modificación de quince ordenanzas e incluye también, por ley, una nueva tasa que regula la prestación del servicio de recogida y transporte de residuos, así como, en cumplimiento de la normativa de bienestar animal, una tasa por la prestación del servicio de recogida, acogida, custodia y cuidado de animales de compañía (perros y gatos) cedidos, extraviados y/o abandonados en el término municipal.

Según los cálculos del equipo de gobierno, el proyecto ya en vigor incluye un incremento de precios que supondrá dos euros y medio euros más de media por familia al mes, lo que supone 30 euros más al año, teniendo en cuenta la actualización del IBI, el impuesto de vehículos de tracción mecánica y la tasa de basuras. Eso sí, se mantienen las bonificaciones para personas vulnerables o las del IBI por la instalación de sistemas de aprovechamiento térmico o eléctrico (placas solares), entre otras.

En concreto el IBI, la gran fuente de financiación del Consistorio, costará un 7 por ciento más este año, al pasar de un tipo de gravamen del 0,543 al 0,581 para bienes inmuebles de naturaleza urbana, lo que supondrá «una media de 20 euros más al año (1,60 euros al mes)», y del 0,70 al 0,75 en rústico. El impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica también sube, en una media de 4 euros más al año (según el cálculo municipal), aunque se estructura en función de los caballos fiscales y hay tramos que suben 6, 8 y hasta 24 euros. Además, la tasa de basuras a la que obliga la ley supondrá una actualización de 7 euros más al año de media, si bien aquí también hay diferentes tramos: las viviendas que gasten más agua pagarán 40 euros más y los negocios también tendrán  que rascarse más el bolsillo, desde los 26 euros del pequeño comercio a los casi 40 euros de bares y cafeterías y los 22 más de las oficinas y similares, por poner solo unos ejemplos de toda la relación de nuevos precios.  

Con todo, a esta letra 'gorda' hay que sumar también otros encarecimientos que los vecinos se irán encontrando en el día a día si hacen uso de servicios como el autobús, los parking de pago o los aparcamientos regulados en vía pública. También costarán más las actividades de servicios sociales como la animación comunitaria, las ludotecas o a las actividades de la tercera edad, además del uso de las instalaciones deportivas o la formación, si es el caso, en las escuelas municipales de Música yArtes Plásticas.

 

 

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