Cristina SanSegundo conoce muy bien cómo es vivir con una enfermedad renal. Pero, lo que es mejor aún, también experimentó en su día cómo la vida cambia «increíblemente» cuando se recibe un riñón nuevo. Por eso este jueves quiso salir a las calles de Ávila, junto con sus compañeros de Alcer Ávila, para celebrar el Día delRiñón, que este año llevaba el lema 'Promoviendo la igualdad en el acceso a la atención sanitaria'. Y hacerlo, además, animando a todos los abulenses a cuidarse para que no tengan que pasar por un calvario de visitas médicas, diálisis y espera antes de poder 'reiniciar' la vida.
Y es que este año, el Día delRiñón quería poner su mirada, sobre todo, en la prevención y en el diagnóstico precoz de unas patologías que, leía Cristina en el comunicado redactado para la ocasión, afecta a un 15 por ciento de la población española.
En total siete millones de personas conviven con algún tipo de dolencia relacionada con estos órganos. «En pocos años, de seguir su ritmo de crecimiento actual, tendrá un tercio de las personas mayores de 65 y se convertirá en la segunda causa de muerte de nuestro país», alertaba la secretaria de Alcer, que sabe que para reducir esas cifras se debe, ante todo, prevenir.
Llevar una dieta sana, beber mucha agua, no fumar, comprobar con regularidad la tensión arterial, la glucosa o la creatinina... Estas son algunas de las medidas que están al alcance de todos y que pueden ayudar tanto a prevenir la aparición de estas enfermedades como a detectarlas de manera prematura.
«Hay que lograr que los ciudadanos se preocupen por su función renal, igual que lo hacen con sus niveles de colesterol, ácido úrico o su tensión arterial», leía Cristina las palabras del presidente de la Sociedad Española de Nefrología, Emilio Sánchez.
Todo para evitar tener que llegar a tener que depender de una máquina o lo que es peor, a necesitar un nuevo riñón para seguir viviendo. «En Ávila hay unas 30 personas a la espera de trasplante», decía Eusebio Moya, tesorero de Alcer, que planteaba otra realidad: la reducción de donantes fallecidos al haber aumentado la esperanza de vida de los españoles y, afortunadamente también, a la reducción de víctimas en accidentes de tráfico.
Por eso desde Alcer Ávila (que en la actualidad cuenta con 105 socios) se apuesta también cada vez más por las donaciones en vida.
«Sin los donantes no estaríamos aquí», aprovechaba Cristina la jornada del Día del Riñón para agradecer la generosidad infinita de estos.«Donantes fallecidos y donantes vivos, que ahora es lo que se intenta potenciar: con un riñón se vive perfectamente y ya hay mucha gente que opta por esa opción, que es la mejor, porque es un riñón que nunca ha dejado de funcionar, no como el de un cadáver», reflexionaba.
«Por eso lo más importante es cuidarse y mantener los nuestros intactos el máximo tiempo posible, beber mucha agua, vida saludable, que al final es lo que se nos pide para todo», ahondaba la secretaria de Alcer Ávila en la importancia de la prevención.