Muchas veces se planteó 'huir' de Ávila, escapar de esta ciudad.No es la primera que lo ha pensado alguna vez ni será la última. «Siempre decía aquello de que me voy a ir de Ávila. Lo he repetido toda la vida».Y aquí sigue María Longina Herráez Mancebo, 'Longi' para todos. Nació un mes de enero de 1964 en Sanchorreja, en casa de su abuela, matrona para la ocasión. Y aunque un mes después se marchó a Huesca, donde su padre,Guardia Civil, estaba destinado, acabaría volviendo. Su infancia lleva el recuerdo de los colegios de San Esteban,Las Nieves o el instituto Isabel de Castilla pensando siempre en estudiar Enfermería.Lo haría en Ávila, por supuesto, aunque en su cabeza volvió a aparecer ese pensamiento de irse. «Cuando acabe las oposiciones me voy» se dijo.Tampoco fue el caso, porque la nota la dio para una plaza en Ávila capital. Aún así volvería a las andadas. Con todo listo para marcharse a trabajar a Inglaterra conoció a Luismi, su marido. Y de todo aquello de marcharse, nada de nada. Qué necesidad cuando tienes aquí «una familia maravillosa» y te das cuenta de que, pese a sus defectos, Ávila no está tan mal. La hacen mejor personas como ella, de las que no se dejan nada en lo que hacen. En su caso como enfermera en la especialidad Familiar y Comunitaria, presidenta de la Subcomisión de Enfermera Familiar y Comunitaria, profesora en la USAL para la formación en prácticas de los alumnos... Y hasta hace apenas un mes, presidenta del ClubAtletismo Ecosport. Dieciséis años al frente del club, disfrutándolo y sufriéndolo, por qué no decirlo.Porque estar al frente de un club en Ávila no sólo es poner la cara.Detrás hay mucho curro, momentos ingratos y mucho desgaste. Ya intentó dejarlo hace tiempo y finalmente no lo hizo. Esta vez sí. «Era el momento idóneo». Lo dejó «no porque las cosas fueran mal», ese rumor habitual cuando se mira la realidad desde detrás del visillo, sino «porque hay personas que pueden hacerlo bien». Tiene claro que era el momento del relevo. Nuevas personas son nuevas ideas, nuevos objetivos... Y nueva motivación y pasión para llevarlo a cabo, lo que siempre ha sido y es el motor en su vida.
Ha sido 16 años presidiendo un club en un deporte al que llegó de rebote, todo hay que decirlo. «Lo primero que hice fue montaña». Siguió con el ciclismo. Le metió el gusanillo Luismi, su marido, la persona que en más de las ocasiones la recuerda con acierto que no estamos en un mundo precisamente amable. «Soy un libro abierto y viene bien que haya gente que te asienta en la realidad». Cuando llegaron los embarazos de sus dos hijos «comencé a correr». Fue en este momento donde empezó su relación con el atletismo y con Ecosport, al que llegaba en 2003 para empezar «un estilo de vida».Porque correr «es una forma de desconectar. Aunque tengas problemas si sales a correr te tienes que centrar en ello».Lo practica y lo fomenta. «Es algo que traslado a mis pacientes».
En 2008 llegó un momento clave. Manuel Galán, fundador del club, decidía dejarlo. Fue entonces cuando un grupo de gente dio un paso al frente. «Nos parecía que lo que se había hecho era muy bonito y queríamos mantenerlo».Cogieron las riendas manteniendo aquel primer objetivo de salir a correr, de fomentar el atletismo popular, pero «adaptándonos a los nuevos cambios». Y fueron muchos los que han ido llegando de su mano y de cuantos la han rodeado en estos tiempos al frente de Ecosport. Porque hablar de Longi es hablar de la evolución del Club Atletismo Ecosport y con ello, en cierto modo, de evolución del atletismo popular abulense. Eran aquellos tiempos los del Circuito de Carreras Populares, «distintas carreras cortitas, accesibles» y que llamaban la atención no sólo de los corredores abulenses sino también de Castilla y León. «¿Y si abrimos aún más las puertas?» se preguntaron. El siguiente paso fue la Media Maratón Ávila Monumental, una manera «de vender este Ávila tan bonita que tenemos». Y todo ello sin olvidar la Carrera Infantil de San Segundo, el Cross Ciudad de Ávila - Memorial José Soriano o el nacimiento de la Escuela de AtletismoEcosport de manos de «alguien con ideas claras» como es Luis Miguel Sánchez Blanco. Una Escuela que tiene claro que debe ser «un siguiente paso» en el futuro del club y que resulta clave para entender su decisión de marcharse. «Ahora es un buen momento.Hay una motivación especial, que es la Escuela. Hay que tirar con ella hacia adelante. Pueden ser la raíces de la estabilidad del club».
Entiendo Longi que era el momento de otras ideas y otras caras. «Creo que hay que dar la oportunidad a otras personas.Otro vendrá que mejor que tú lo hará.Y si no lo hace mejor, lo hará distinto y eso también es bueno» está convencida. «Es bueno que haya un cambio, que aproveche las cosas buenas que hemos hecho los demás y genere cosas nuevas.Lo que quiero es que haya objetivos nuevos. Tenemos una serie de cosas asentadas pero hay cosas nuevas que tenemos que abordar. Que la nueva dirección quiere mantener los que hay, perfecto, pero yo creo que es importante que se sigan haciendo cosas nuevas, que la gente se vaya motivando, que la gente se vaya implicando». Un cambio que debe llegar desde nuevas caras visibles.
Una nueva etapa que vislumbra necesaria pero que ya no podía emprender ella. «Siempre he creído que hay que tener en cuenta que cuando tu futuro no te motiva debes plantearte tu presente».Es lo que ella hizo. Hasta ahora siempre había encontrado motivaciones para seguir adelante. Si había aguantado estos 16 años había sido «porque desde el primer momento ha habido cambios. Ha sido adaptación pura y dura.En ningún momento nos hemos estancado». Ha sido un caminar constante. «Del Circuito de Carreras Populares pasamos a hacer un 10.000, del 10.000 al Cross, de ahí a la MediaMaratón... Vas consiguiendo objetivos, una evolución constante».Buscando en todo momento la estabilidad, «no nos hemos dormido». Tiene muy claro que la estabilidad se ha conseguido, pero ahora toca «adaptarse» de nuevo. «No hay que acomodarse». Tiene claro que puede seguir «aportando» al club. Y lo hará. «No me voy. Sigo en Ecosport, activa, pero desde otro punto».
Una distancia que la permitirá cargar las pilas. Han sido años de mucho trabajo compartido. Le viene a la cabeza la figura de Antonio Alonso, Clemente, José Antonio de Miguel,José Soriano... Muchos nombres en estos años, porque su presidencia ha sido 'compartida' por así decirlo. «No soy una persona individualista, soy de trabajar en equipo.Todas las ideas que hemos ido desarrollando en el club han sido trabajadas en equipo, porque si me vendes una idea y me la motivas, la lucharé».
Se ha apasionado con el club, pero también lo ha sufrido. «La dirección de un club implica mucho. La gente no sabe el trabajo que hay detrás. La gente se piensa que es sólo poner la cara pero es mucho más». Es el antes de las carreras pero también el durante y el después. «Cuando estoy en una carrera lo único que veo son todos los problemas que ha habido».La gente se podrá acercar a ella para darla la enhorabuena y lo agradecerá, pero su mente estará puesta «en todos los problemas que hay que solventar. Yo no disfruto las carreras cuando estoy dentro de la organización».Ahora ya podrá hacerlo.
Dejará de sufrir esa parte de ser presidente que no se ve y dejará de sufrir los 'peros' de una ciudad con demasiadas barreras para poner en marcha otras cosas. «Ávila es una ciudad idílica, bien situada pero mal comunicada» en la que cuesta poner algo en marcha. «No hay solvencia económica para poder hacer eventos. Entiendo que el Ayuntamiento hace lo que puede pero algo falla para que estemos disminuyendo recursos en lugar de estabilizarlos o aumentarlos».Como los cangrejos, vamos hacia atrás, a peor. «Es curioso. Cuando había menos corredores, se daba más dinero. Ahora que hay más corredores hay menos dinero». No sólo es lo económico. Porque tiene claro que hablar de recursos es hablar también de la falta de jóvenes en la ciudad. «Si tuvieran mayores salidas sería una población que se quedaría aquí». Más población joven es «más deporte base». Un laberinto sin salida. «Muchas veces no es sólo el dinero que te doy, que hay veces que es poco, es que nos fallan los cimientos, las infraestructuras deportivas». Todo ello genera un escenario en el que «lo que se busca es salvar el momento actual sin visión de futuro. La batalla se gana si tocas todos los frentes, no si solo tocas uno y hay muchos recursos que hay que tocar».
Lo ha vivido y lo ha sufrido porque lo ha hecho desde pasión. «Necesito tener pasión en todo lo que hago. Si algo no me motiva, tengo que cambiarlo». No sólo en el deporte, también en su profesión, la enfermería. «Me gusta hacer las cosas bien» porque la gusta lo que hace.Y esa emoción que siente la transmite. En su profesión, la enfermería, es fundamental. «Somos un personal sanitario muy cercano al paciente. Esa persona confianza en ti. La enfermedad desestabiliza mucho. Tenemos una profesión preciosa para ayudar a la gente».
Proactiva al límite, «cada día es una oportunidad que tienes para hacer algo nuevo. Lo llevo a mi profesión, a mi casa... A todo». Exprime el día más allá de las 24 horas. Y con ello, lo que le ofrece la ciudad, aquella de la que quiso escapar y que ahora la retiene. «Una de las cosas que más me gusta de Ávila es que en el mismo día puedo hacer muchas cosas. En el mismo día puedo ir al gimnasio, puedo salir a correr, puedo ir al cine, puedo ir al teatro, puedo estar con mi familia». Si el día tuviera más horas, lo pasaría haciendo algo. «Mi hija me pregunta para qué tengo sillones en casa si nunca me siento».
¿Qué es lo primero que se le viene a la cabeza sobre Ávila?
Lo primero que se me viene a la cabeza sobre Ávila es La Muralla. De hecho me encanta viajar, pero cuando vuelvo a Ávila al divisar la Muralla ya huelo a casa y se me dibuja una sonrisa en la boca.
¿Qué es lo que más le gusta de Ávila?
Me gusta de Ávila que es una ciudad cómoda para vivir, donde tienes la posibilidad de en un día, tener distintas actividades que te dan calidad de vida, porque puedes compaginar tu trabajo y otras actividades lúdicas como el cine, comprar o practicar algún deporte. Puedes incluso disfrutar de la naturaleza sin irte muy lejos como en el parque del Soto, la rivera del río Adaja, subir a Sonsoles o ir al puente Romanillos.
¿Y lo que menos?
Lo que menos me gusta es que siendo una ciudad tan bien situada, esté tan mal comunicada y que además no da muchas alternativas de trabajo a los jóvenes. Es una gran ciudad que no solo tiene que vivir del turismo.
Un lugar para perderse.
Me encanta perderme por el casco antiguo, pasear por sus calles cuando no hay mucha gente y descubrir escudos, inscripciones en las piedras, detalles que no te fijas cuando vas deprisa o has pasado tantas veces que no das importancia. Ávila, siempre tiene la capacidad de sorprenderme con detalles que siempre han estado allí, pero no somos conscientes de ello.
Un recuerdo de su infancia.
El recuerdo de mi infancia, le tengo en el pueblo en el que nací y pasé todos los veranos, Sanchorreja. Un pueblo de la sierra baja de Ávila donde junto con mis hermanos y primos montábamos en el trillo con mi abuelo, aprendí a bailar jotas desde pequeña y a disfrutar de la naturaleza y de los animales que mis abuelos tenían en la granja, como ir a coger los huevos de las gallinas con mi abuela, ver como ordeñaba las vacas o como hacían la matanza.
Un personaje abulense que le haya marcado.
En realidad mas que el personaje son los lugares marcados por este personaje que es Teresa de Jesús, mujer con carácter que supo luchar con ilusión y no sin esfuerzo por sus creencias . Yo crecí en el barrio de San Esteban y vivía muy cerca de la iglesia de la Santa, donde para mis momentos de reflexión me encantaba ir a la capilla de Santa Teresa en el ábside izquierdo donde también estaba el huerto donde Teresa hacia sus planes con su hermano. De hecho también fue la iglesia donde contraje matrimonio con Luismi.
El mayor cambio que necesita Ávila es...
El mayor cambio que ahora necesita Ávila es mejorar sus líneas de comunicación, está bien situada pero mal comunicada y no solo por el turismo, sino porque sería la manera de que mas familias vivirían en Ávila aunque trabajaran fuera de ella. También sería de gran ayuda tener buenas infraestructuras deportivas, no solo para los deportistas afincados en Ávila sino para atraer y poder realizar competiciones regionales o nacionales como por ejemplo en natación o atletismo.
Y Ávila tiene que mantener...
Mantener los recursos medio ambientales de la capital, como el Parque natural del Soto, Fuentes Claras, parques y jardines de la capital, lindes del río Adaja. Y por supuesto no perder el afincamiento de nuevas empresas que den oportunidad de trabajo a nuevas generaciones.
¿Qué le parece la Ávila hoy?
Actualmente la ciudad de Ávila es como un 'Tetris', que es imposible saber cual es el camino mas cercano, pero esperemos que todo sea por un futuro mejor de nuestra ciudad. Necesitamos tener visión de futuro.
¿Cómo ve Ávila en el futuro?
A corto plazo no veo muchas alternativas de cambio pero espero que a largo plazo, podamos contar con una ciudad con mejores infraestructuras tanto deportivas como urbanísticas. Una ciudad que sea una alternativa con recursos para jóvenes, con recursos de ocio y laborales.
¿Qué puede aportar a Ávila y su provincia?
Mi aportación a la ciudad de Ávila está dirigida por mi profesión hacia la salud comunitaria, trabajando no solo con pacientes crónicos sino en la prevención con toda la población y aportando mi granito de arena para dar a conocer estilos de vida saludables que están al alcance de todos y no solo hay que dar años a la vida sino vida a los años. Ávila es un sitio estupendo para vivir con calidad de vida.