El convenio de colaboración para la conservación y mantenimiento de templos de la provincia que no han sido reconocidos con la categoría de BIC o de Monumento, que la Diputación Provincial y el Obispado llevan más de cuarenta años consecutivos firmando para ayudar a que las iglesias y ermitas con problemas estructurales graves o potencialmente graves sean restauradas, beneficiará este año a las iglesias de tres localidades de la provincia, La Cañada, San Vicente de Arévalo y La Carrera, según se informó en el acto de rúbrica del convenio que celebraron el presidente de la Diputación, Carlos García, y el obispo de la Diócesis, Jesús Rico, acompañados por el diputado de Cultura, Javier González, y el delegado de Patrimonio Cultural de la Diócesis. Óscar Robledo.
Carlos García, que recordó la importancia que significa que esta colaboración sume más de 40 años de vida, informó que cada una de las instituciones firmantes aportará 75.000 euros a este convenio de 2024 (que en conjunto sube su presupuesto en un año de 120.000 a 150.000 euros), dinero que será destinado para intervenir en la mejora de la cubierta de la iglesia de La Cañada (85.000 euros), para la rehabilitación de la de San Vicente de Arévalo (40.000) y para la cubierta del templo de La Cañada (25.000 euros).
Quiso «poner de manifiesto» el presidente de la Diputación «la importancia que tiene cuidar nuestro patrimonio, en este caso eclesiástico», porque son «lugares de encuentro, de convivencia, de unión de muchas generaciones de abulenses»; además, añadió, «creo que desde la Diputación mandamos un mensaje de compromiso de cara a futuro como una institución que colabora con el Obispado, al cual también quiero agradecer esa magnífica labor que se viene haciendo en los 247 municipios de la provincia».
La actuación en la iglesia de La Cañada, explicaron, «ha sido una urgencia, debido al incendio que sufrió; en La Carrera, sin embargo, es la segunda fase en un proceso que intenta recuperar la iglesia en su totalidad; y en San Vicente de Arévalo, que también respondía a una urgencia que ya llevaba unos años en cartera, ha salido adelante consiguiendo el embellecimiento y la recuperación de la imagen antigua de la torre». Con el estudio técnico de los tres proyectos ya realizado, en San Vicente de Arévalo las obras ya están «bastante avanzadas, en La Carrera no han empezado aún, y en La Cañada están ya también los medios auxiliares para comenzar en breve».
«En pro del bien común». El obispo agradeció a la Diputación «este esfuerzo que ha hecho en pro del bien común, porque para eso estamos todos, sea la iglesia, sean las distintas instituciones. La cultura está impregnada en esta tierra fundamentalmente por el hecho religioso y por tanto esa cultura, esa expresión cultural que se da en la arquitectura y en todas las obras, es reflejo del ser de esta tierra».
Añadió Jesús Rico que con este convenio de colaboración «la Diputación de Ávila nos ayuda a mantener lo que es de todos y que está en favor de todos, sabiendo que esa cultura nos ayuda a todos a entender mejor de dónde venimos, quiénes somos y hacia dónde podemos ir».