La provincia de Ávila vuelve a ser protagonista de los actos conmemorativos que se están celebrando en España y China con motivo del 50 aniversario del inicio de relaciones diplomáticas entre ambos países. Si en septiembre del pasado año lo fue con una colección de recreaciones de tradiciones abulenses obra de Susana Ragel que se inauguró en Pekín y luego recorrió otras ciudades chinas, ahora lo hace en el Palacio Real de Madrid, donde hasta el 26 de mayo puede visitarse una muestra que reúne a cien pintores chinos y españoles, entre ellos Antonio López, escenario singular en el que luce una recreación de la fiesta de Las Luminarias de San Bartolomé de Pinares, también de esta artista madrileña que hace cuatro años decidió trasladarse a vivir a La Adrada.
Explica Susana Ragel que esta pintura, que también pudo verse en China el pasado año, la creó para celebrar "la belleza y la riqueza de significados" de una tradición que "ya conocía antes de venir a vivir a la provincia de Ávila, donde mis abuelos tenían una casa". Fue esta dedicada a las Luminarias, titulada La huida, la primera de las muchas pinturas que realizó inspirándose en la tradición abulense, "nada más aterrizar en esta provincia", y lo hizo, explica, porque "me parecía muy simbólico de la huida que yo realicé escapando de la ciudad para irme a vivir al campo, en concreto al Valle del Tiétar".
Entrando al detalle de la concepción y el significado de esa obra que cuelga en el Palacio Real (titulada Más allá del Realismo: el arte figurativo en China y España), añade su autora que, "con esa imagen del jinete perdido en el humo y el caballo que se dirige hacia fuera del cuadro, el espectador queda de frente viendo una imagen de dos seres, un caballo y un jinete, que lo que hacen es precisamente del marco, como si huyesen, y ese es precisamente el concepto de la pieza", una metáfora cargada de fuerza en la que "utilicé las imágenes tan maravillosas que ofrecen las Luminarias para representar mi sentimiento personal".
Para esta exposición colectiva e internacional, que Susana Ragel explica que "surge independientemente de la individual que tuve en septiembre en Pekín", comenta la artista que "elegí esta recreación de las Luminarias porque, sinceramente, me parecía la mejor pieza de las que tenía, y de hecho creo que he acertado, porque por el color y otras características llama bastante la atención dentro de la exposición, que es más realista, de colores más grises".
A la satisfacción por haber sido invitada a esta exposición, en la que entre los cien artistas presentes se cuentan maestros de la talla de Antonio López García, Isabel Quintanilla o Julio Vaquero, por España, y de Quan Shangshi, Jin Shangyi o Zhan Jianjun, por China, añade Susana Ragel la de que "solamente seleccionaron a tres artistas para el merchandising, y una de ellos fui yo".