El tejido productivo nacional ha dejado atrás las malas cifras de la pandemia y empieza a recuperar, en su mayor parte, los beneficios económicos gracias al consumo privado de los hogares, que ha repuntado en lo que los economistas consideran una evolución ascendente, a pesar de la inflación y del incremento de los costes a los que se han enfrentado en estos últimos años.

En esta línea, el Banco de España sostiene que los márgenes sobre ventas de las empresas españolas han aumentado hasta situarse, en términos agregados, «en niveles muy próximos o incluso superiores a los registrados antes del comienzo de la crisis sanitaria». 

A partir de los datos de la Central de Balances Integrada (CBI) de la institución financiera, se ha medido el margen y la inversión para más de 300.000 sociedades españolas cada año durante el período comprendido entre 2008 y 2022.

 Empleando una muestra de empresas que están presentes en la CBI todos los años entre 2019 y 2022, el supervisor señala que el aumento reciente de las ganancias sobre ventas se ha concentrado, fundamentalmente, en aquellas compañías que presentaban un nivel más reducido antes de la pandemia, en 2019.

 En cambio, para las corporaciones que en aquel año mostraban unos márgenes mayores, éstos han tendido a reducirse en los últimos años, según el Banco de España.

En la economía nacional, la mayoría de las empresas, más del 85%, se sitúan en el tramo en el que la relación entre margen e inversión es positiva, frente a la otra cara que es donde están las firmas más pequeñas, más jóvenes y más productivas. 

En el peor de los casos, también ha habido empresas que no superaron los paros y la disminución de actividad y se vieron obligadas a cerrar ante la falta de viabilidad.

Asimismo, la institución financiera apuntó que el 78% de las compañías españolas reconoció haber incrementado sus precios a lo largo del pasado ejercicio, representando el peso más elevado entre los grandes países de Europa, ya que Alemania, Italia y Francia se quedaron por detrás, con porcentajes que del 71%, al 70% y al 67%, respectivamente. Solo las corporaciones estadounidenses mostraron un mejor desempeño en el crecimiento de los precios y la rentabilidad en sus beneficios, ya que el 87% reconoció haber subido márgenes el pasado ejercicio.

Por sectores, las mayores ganancias en España se dieron en el tecnológico y el de telecomunicaciones, donde un 86% de las empresas encuestadas confesó haber incrementado precios, seguido por servicios financieros, con un 82%, y consumo, con un 78%.

Previsiones

Las perspectivas globales para los próximos trimestres apuntan a un enfriamiento de los precios, ante una mayor competencia, especialmente en el segmento low cost. En el caso de España, ninguno de los directivos anticipa que vaya a bajar tarifas, pero sí hay un 17% que admite que las congelará, mientras que el 24% apunta a que se incrementarán por debajo del IPC.

Además, un 40% avanza que subirá precios en línea con la inflación y otro 20% reconoce que los elevará por encima de este indicador. «El precio sigue siendo clave para el crecimiento de las empresas frente al volumen, lo que significa que es fundamental realizar revisiones periódicas y, en especial para el sector de consumo donde los cambios son y serán, en los próximos años, claves para el crecimiento económico», concluye el informe.