La secretaria general de Transporte Terrestre, Marta Serrano Balbuena, aseguró este martes que el futuro de la conexión de Ávila con la A-6 por autovía dependerá de las conclusiones que se saquen del estudio que valorará las actuaciones para las autopistas AP-6, AP-51 y AP-61 y sus carreteras aledañas ante el fin de la concesión del peaje en 2029 y en el caso del tramo de la A-40 entre Ávila y Maqueda apuntó que, después de que hayan pasado 19 años desde que se dieron los primeros pasos, es «necesario proceder a una actualización» de los mismos, al tiempo que reconoció que «estamos estudiando la rentabilidad económica, ambiental y social» de ese proyecto.
Dichas manifestaciones fueron realizadas en el seno de la Comisión de Transportes y Movilidad Urbana ante las preguntas formuladas por los diputados del PP por Ávila, Héctor Palencia y Patricia Rodríguez, que denunciaron la «incapacidad de gestión» del Ministerio de Transportes y el «desprecio» del PSOE por la provincia de Ávila teniendo en cuenta el desarrollo de estos proyectos durante los últimos seis años.
Palencia comenzó su intervención asegurando que este 24 de septiembre será recordado por el día en que «el Gobierno de Sánchez y el ministro de Óscar Puente liquidaron el tramo de la autovía Ávila-Maqueda», y precisó que «acaban de destruir sin despeinarse 19 años de trabajo y han enterrado mucho dinero público invertido, más de 2 millones de euros», después de que afirmó que el Ministerio ha rescindido el contrato de redacción del segundo modificado del estudio informativo del tramo de la autovía Ávila-Maqueda. El diputado popular insistió en que «llevan seis años sin hacer nada, hasta que han matado un proyecto que vertebra la provincia de Ávila y el este de España con el oeste».
A su vez, Palencia también se refirió al proyecto de conexión de Ávila con la A-6, y recordó que, en noviembre de 2021, el BOE publicó la declaración de impacto ambiental y «tenían seis meses para aprobar el estudio informativo definitivamente», sin embargo, añadió, «llevan dos años y diez meses paralizando la conexión de Ávila con la A-6 y, por tanto, con Valladolid». Y puso como ejemplo «de la intencionalidad» del PSOE, del Ministerio de Transportes y del Gobierno «para perjudicar a Ávila y a los abulenses» lo ocurrido con el tramo de la A-40 entre Toledo y Ocaña en el que apenas transcurrieron ocho meses desde la declaración de impacto ambiental en septiembre de 2022 hasta la aprobación definitiva del estudio informativo en mayo de 2023.
Ante esta situación, le reclamó a la secretaria general que aclarase «cuándo van a publicar en el BOE la aprobación definitiva del estudio informativo» de la conexión de Ávila con la A-6 «y si les va a dar tiempo a aprobar el proyecto de construcción antes de que caduque la declaración de impacto ambiental».
La secretaria general de Transporte Terrestre, Marta Serrano Balbuena, comenzó su intervención recordando que el corredor de la A-40 «es un corredor con tramos de muy baja densidad de tráfico, inferior a 5.000 vehículos diarios», que está diseñado para conectar el sur de Castilla y León con el norte de Castilla-La Mancha y Aragón, sin pasar por Madrid y rodeándola por Toledo y Cuenca, y en ese marco estas esos dos proyectos abulenses. Sobre la conexión de Ávila con la A-6 por autovía, indicó que «el 6 de noviembre de 2021, el estudio informativo correspondiente obtuvo la Declaración de Impacto Ambiental favorable», si bien, recordó, «en diciembre del año pasado se licitó un nuevo estudio que valorará las actuaciones necesarias en las autopistas AP-6, la AP-51 y la AP-61 y carreteras aledañas cuando finalice el periodo de concesión» y, puntualizó, «es necesario proceder a coordinar ambos estudios». De esta forma, insistió en que «necesitamos valorar las necesidades de actuación en el corredor de la autovía A-40 en este tramo». Al tiempo que apuntó que el tramo por autovía entre Ávila y la A-6 «esta avanzando lento, pero está avanzando» y defendió que «el Gobierno tiene un compromiso medioambiental importante de optimizar el uso de las infraestructuras».
Respecto al tramo de la A-40 entre Ávila y Maqueda, la secretaria general afirmó que «el estudio informativo también se encuentra en fase de redacción, pero dada la antigüedad del estudio y las distintas fases por las que ha pasado a lo largo de los 17 años de redacción, es necesario proceder a una actualización de los trabajos». En este sentido, recalcó que ese estudio informativo, desde sus orígenes, «ha pasado por dos procedimientos de información pública y ahora requeriría un tercero para cumplir con el objetivo del contrato de acuerdo a los requisitos actuales», sobre todo los ambientales, remarcó. Y añadió que «es fundamental cumplir con toda la legislación, tanto europea como española, relativa a protección de los impactos ambientales» y «sería necesario una importante actualización de los trabajos»
Réplica. En el turno de réplica tomó la palabra la diputada Patricia Rodríguez, que pidió a la secretaria general que «no nos trate a los abulenses por tontos». Rodríguez insistió en que el proyecto de la A-40 «está paralizado porque no existe voluntad política de impulsarlo», como tampoco, afirmó, hay voluntad política de resolver los problemas ferroviarios que tiene Ávila, «de eliminar el peaje o plantear una bonificación a los conductores recurrentes» que viajan a Madrid.
Por su parte, la secretaria general defendió que»nuestro compromiso es firme con la provincia desde el año 2018» y aseguró que «se han invertido más de 50 millones de euros en las carreteras del Estado en la provincia que se han destinado a mejoras en la conservación, mejoras en la seguridad vial e intentar minimizar los accidentes en la red viaria». Así se refirió a proyectos como el nuevo puente de La Gaznata, en la N-403, o los pasos dados para el desdoblamiento de la tramo de la N-110 que conectará desde la circunvalación de Ávila hasta La Serrada, con una inversión prevista de más de 20 millones de euros.
Serrano Balbuena aseguró que «nos gustaría poder avanzar mucho más rápido» en el proyecto global de la A-40 pero apuntó que «todavía están en fases muy preeliminares unos proyectos que suman 285 kilómetros y que tienen más de 2.300 millones de presupuesto, precisamente para garantizar la protección ambiental de la Sierra de Gredos». E insistió en que el tramo de Ávila-Maqueda, «de algo más de 90 kilómetros, supondría casi mil millones de euros de inversión», al tiempo que reconoció que «estamos estudiando la rentabilidad económica, ambiental y social» de ese proyecto, «sin perjuicio de que se pueda impulsar su ejecución en el caso de que se viera que la rentabilidad es positiva».
Y en cuanto al tramo de Ávila a la A-6, para el que también apuntó que «tiene una demanda de tráfico baja, entre 3.000 y 4.000 vehículos diarios», remarcó para concluir que «es necesario coordinar el desarrollo y el resultado de ambos estudios».